El envejecimiento de las personas es uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de demencia, pero no es una condición fatal. Se puede prevenir, advirtió Ana Luisa Sosa, responsable de la Clínica y Laboratorio de Demencias del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía Manuel Velasco Suárez.
Afirmó que hay factores de riesgo que se pueden modificar, entre otros, evitar o controlar enfermedades como obesidad, diabetes e hipertensión arterial, eliminar el tabaquismo y la inactividad física.
Más de la mitad de los casos de demencia, entre ellas Alzheimer, se podrían evitar con sólo cambiar el estilo de vida, dijo la especialista.
Actualmente, de acuerdo con datos del INEGI y algunos de demencia, se estima que en México viven 1 millón 200 mil personas con deterioro cognitivo mayor. De ellas, 90 mil se encuentran en las Ciudad de México.
El 21 de septiembre es el Día Mundial del Alzheimer. Con ese motivo la especialista llamó la atención de tomar conciencia de la importancia de este problema de salud que en 2050 afectará a 3.7 millones de individuos en el país, así como a sus familias.
Sosa destacó que las demencias se presentan más en familias de ingresos bajos y medios. A causa de la enfermedad y las necesidades de cuidado y atención médica del paciente, requieren disponer de hasta 60 por ciento de sus ingresos económicos.
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