En el gobierno federal se terminaron los padrinos, advirtió el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien llamó a los funcionarios a que “lo piensen” ya que no se permitirán “negocios sucios”, por lo que si un funcionario incurre en ello podría incluso terminar en la cárcel. Además, sostuvo que en aduanas del país había un control del crimen organizado, por lo que se está “limpiando” las aduanas del país.
En su conferencia de prensa en Palacio Nacional de este lunes, el presidente recalcó, al explicar las acciones para evitar la corrupción en aduanas y otras instancias públicas, que “no se da el visto bueno a ningún negocio sucio o algún acto de corrupción, arriba, pero tenemos ir limpiando y hay áreas en las que se requiere avanzar más”.
En seguida, agregó: “Aprovecho para decirle a los funcionarios públicos que no corran riesgo, porque no se va a tolerar la corrupción, cero corrupción, se acabó el influyentísimo. No es de que me va a proteger mi padrino que tengo arriba. Ya no hay padrinos, se acabó eso, y les recuerdo que ya es delito la corrupción”.
Les pidió a los funcionarios federales que “lo piensen, por ellos, por sus familiares” antes hacer negocios al amparo del poder público, ya que la corrupción ya es delito grave, lo que implica cárcel sin derecho a fianza.
“El que no quiera vivir con su sueldo, o que no le alcance, que le busque por otro lado, en la iniciativa privada, que ponga su propio negocio y puede ser que obtenga más beneficios y más ingresos, pero el gobierno no es para hacer dinero, no es fábrica de nuevos ricos”.
Sobre las aduanas del país, precisó que uno de la “más infiltradas” por el crimen organizado es la de Manzanillo, pero afirmó que con Ricardo Ahued como Administrador General de Aduanas, mejorará esta situación para evitar corrupción.
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