En el caso de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, se llamará a los funcionarios que estuvieron en ese momento en cargos públicos, que conocieron del caso y pueden aportar información, entre ellos el ex presidente Enrique Peña Nieto, afirmó el fiscal especial Omar Gómez Trejo.
Al rendir un informe del estado de las investigaciones a cinco años de los hechos, Gómez Trejo dijo que a partir de la próxima semana serán llamados ante la Fiscalía a su cargo ex funcionarios municipales, estatales y federales relacionados con las investigaciones, incluyendo al ex procurador Jesús Murillo Karam.
“Ya señalamos, todas aquellas autoridades que tenían un cargo en ese momento. Ninguna persona está por encima de la ley, si es necesario, que, de los propios indicios, de las investigaciones, sea cualquier persona, será llamada ante la justicia”, afirmó el Gómez.
En rueda de prensa matutina en Palacio Nacional el subsecretario de gobernación Alejandro Encinas informó que en la reapertura de las pesquisas se integrarán líneas de investigación que habían sido omitidas.
Además, el Grupo Interdisciplinario de Especialistas Internacionales (GIEI) volverá a trabajar con todos sus integrantes, se tendrá el seguimiento de la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos y de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
Enfatizó que una pieza clave será Murillo Karam, quien ya ha dado entrevistas por la reapertura del caso.
“Y lo más importante de las declaraciones que ha hecho respecto a refrendar la hipótesis de que los muchachos fueron incinerados en el basurero de Cocula, es que él dijo que en ningún momento dijo que todos habían sido incinerados ahí”, manifestó.
Entre las líneas de investigación a seguir, están los 80 millones de llamadas telefónicas que se realizaron en la zona de Iguala desde la noche de la desaparición de los estudiantes y hasta cuatro años después.
“No se trata de un matiz más, se trata de un elemento que muestra la vulnerabilidad de la tesis que ha sostenido la verdad histórica”, enfatizó Encinas.
Eso permitió construir una red primaria de 84 mil líneas prioritarias y 116 números telefónicos específicos.
“Nos ha permitido identificar las horas críticas y el seguimiento minuto a minuto de esta operación. No puedo dar detalles, pero sí tenemos certeza de cómo se realizó el operativo por los grupos delictivos, con varias conclusiones, una de ellas, es que no hubo contacto por parte de ningún estudiante con algún grupo delictivo o con alguno de sus integrantes”, externó recalcó el subsecretario.
Encinas reiteró que de las inspecciones que se han desarrollado en diversos puntos de cinco municipios de Guerrero, donde se presumía podrían encontrarse pistas del paradero de los jóvenes estudiantes, no se ha tenido algún “resultado positivo”.
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