Propiedades de Bartlett equivalen a 9 casas blancas de Peña

Tomado de ‘Diario Contrapeso’

El pasado 28 de agosto, una investigación realizada por la periodista Arelí Quintero –publicada en el portal de Carlos Loret de Mola– evidenció la increíble fortuna que posee el titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, quien, de acuerdo a su declaración patrimonial, cuenta con una fortuna de 51 millones de pesos e ingresos anuales por 11 millones.
Sin embargo, resulta ser que su fortuna es 16 veces más grande a la declarada, esto tan solo en propiedades, ya que, a través de familiares, empresas y presuntos prestanombres, se ha hecho de un imperio inmobiliario de 25 propiedades, las cuales tienen un valor aproximado de más de 800 millones de dólares, una cantidad exorbitante para un funcionario.
Cabe destacar que, de acuerdo con su declaración patrimonial publicada en enero de este año, señaló ser dueño de solo dos edificios y tres locales.
Fácil, el titular de la CFE no ha sido nada tonto, ya que desde 2001 dejó de registrar los bienes a sus nombres; no obstante, a partir de esa fecha, se multiplicaron de manera acelerada las propiedades a nombre de su pareja, Julia Elena Abdala Lemus, así como de los hijos que ambos tienen de matrimonios anteriores.
Ante esto, y luego de una serie de declaraciones que causaron un poco de controversia por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador y la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, que defendían a Bartlett a capa y espada, la noche del lunes pasado, la Secretaría de la Función Pública (SFP) señaló que abrió un expediente para investigar la declaración patrimonial y de intereses de Manuel Bartlett Díaz, luego de recibir una denuncia ciudadana a través del Sistema Integral de Denuncias Ciudadanas.
Aunado a todo lo anterior, resulta curioso que apenas en la administración pasada salió un caso parecido a la luz una investigación por parte de la periodista Carmen Aristegui y su equipo, la cual tuvo por nombre La casa blanca de Enrique Peña Nieto, ya que evidenciaron que el presidente poseía una casa en Las Lomas, Ciudad de México, con valor de 7 millones de dólares, aproximadamente 86 millones de pesos.
Al hacer una comparación de la Casa Blanca de Peña y los Bienes de Bartlett, la diferencia es de más de 700 millones de pesos, equivalentes a 9 Casas Blancas de Peña, lo que debería de poner en verdadero predicamento al titular de la CFE.
Asimismo, los dos casos tuvieron redes familiares para que los verdaderos propietarios no tuvieran problema, la Casa Blanca estaba siendo pagada supuestamente por Angélica Rivera, quien salió a aclarar las versiones que se manejaban, justificando que todo fue por el arduo trabajo en el que se llegó a desempeñar.
Mientras que las propiedades de Bartlett están a nombre de su pareja, Julia Elena Abdala Lemus, así como de los hijos que ambos tienen de matrimonios anteriores.
Por último, en los dos casos destacan los investigadores “carnales”.
El 3 de febrero de 2005, Peña Nieto designó a Virgilio Andrade como secretario de la Función Pública, cargo que había permanecido sin responsable desde su llegada a la Presidencia en 2012, el primer trabajo de Andrade fue investigar los conflictos de interés del presidente EPN y su esposa, Angélica Rivera, así como del entonces secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray. Sin embargo, el mismo Andrade exoneró a Peña pese al evidente conflicto de interés.
Ahora, la titular de la SFP, Irma Eréndira, muestra un total apoyo a Bartlett, lo que hace suponer que de igual forma se le exonerará de cualquier delito, esto pese a ser un caso más controvertido que el de Peña Nieto.