CIUDAD DE MÉXICO.- Andrés Manuel López Obrador anunció que analiza promover amparos ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para que el Gobierno federal ya no asigne contratos del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en los tres meses que faltan para la elección presidencial.
Reveló que esta tarea se la encomendará a la exministra Olga Sánchez Cordero y al ingeniero Javier Jiménez Espriú, a quienes designó como secretarios de Gobernación y de Comunicaciones y Transportes (SCT) en caso de llegar a la Presidencia de la República.
Luego de reunirse con integrantes del Consejo de la Comunicación en un hotel de la zona de Polanco, el candidato de la alianza Juntos Haremos Historia (Morena-PES-PT) descartó cualquier posibilidad de reconsiderar ese tema para que la terminal aérea no sea trasladada a la base militar de Santa Lucía, como plantea.
“Yo ya no puedo ser tolerante con la corrupción. Es cero corrupción, y yo considero que la construcción del aeropuerto es corrupción, y los que la defienden están metidos en el negocio de la corrupción”, aseguró.
El político tabasqueño afirmó que estos empresarios e inversionistas “quieren contratos leoninos y manchados de corrupción”, y advirtió que no va a aceptar eso”.
“Cero tolerancia a la corrupción, aun cuando este señor del Consejo Coordinador Empresarial (Juan Pablo Castañón) segura tenga negocios en este asunto”, enfatizó.
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