El retorno seguro a las fuentes de trabajo no sólo incluye medidas de higiene y sana distancia, sino que también tiene que ver con aspectos del entorno psico-laboral y técnicas para el manejo adecuado del estrés, la angustia, ansiedad y depresión, señaló el doctor Hans Oleg Olvera, director de Neuropsicometría.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) está alertando sobre el incremento de esas manifestaciones psicológicas en los entonos laborales luego de los retornos a la “nueva normalidad” indicó el especialista durante su participación en la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) Estado de México.
aunado a esto, detalló que las empresas tendrán que atender, además de las medidas para prevenir contagios o rebrotes del coronavirus, temas para afrontar el estrés, no nada más el relacionado con lo laboral sino también el que se genera por el ruto de vida, técnicas de manejo de ansiedad y angustia, técnicas de prevención de la depresión, aseveró.
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Subrayó la importancia de la capacitación en temas de protección de la salud y políticas temporales por nivel de alerta, entre ellas la identificación de las personas consideradas vulnerables, a quienes se les deberá privilegiar en la capacitación, así como el trabajo desde casa o condiciones especiales en la fuente laboral.
Recomendó a los empresarios atender el tema de la promoción y prevención de la cadena de contagio y aplicarse en la dotación de equipo de protección y prevención para sus trabajadores, además de dar cumplimiento a las normas sanitarias que correspondan a cada uno de sus giros.
Hans Oleg Olvera hizo hincapié en la situación psicológica y emocional del confinamiento al comentar que no sólo la cantidad de memes ponen de manifiesto el sentir de las personas, sino que en China ya se demostró el daño a las relaciones familiares, pues al regreso a la actividad se contabilizaron más de dos mil solicitudes de divorcio que esto generó.
Habló de la necesidad de reducir los impactos del estrés laboral y de la relación pareja-trabajo, sobre todo cuando tengan que ver con la atención de los usuarios o los clientes al concluir la fase de aislamiento social de la pandemia, por lo que deben ocupar un lugar fundamental en los programas de retorno a la “nueva normalidad”.
Marcó como importante el aspecto de la igualdad y la no discriminación, la identificación y manejo del trauma en especial entre quienes tienen tiempos largos de traslado y si son parte de la producción adecuar los horarios para que de manera escalonada todos cumplan, lo que significa trabajar más por objetivos que por jornadas largas; además de la identificación y manejo de violencia laboral y la implementación de políticas de prevención de riesgos, como parte esencial para el retorno.
Recomendó que al elaborar un plan de retorno, cada empresa se apoye en normas oficiales mexicanas como la NOM-019, NOM-025, NOM-030 y NOM-035, entre otra, en donde encontrarán los principios de la protección a la salud y a la productividad.
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