internacional en varios temas. Por ejemplo, calificó de “cobarde matoncito” a López Obrador
La Paz.- El expresidente boliviano Jorge Quiroga renunció el miércoles al cargo de delegado
presidencial, nombrado por la presidenta interina Jeanine Áñez, para evitar comprometer al gobierno
por sus polémicas declaraciones en varios asuntos del país.
“Le agradezco la delegación con la que me honró, la que hoy debo dejar para evitar que mis
posiciones o acciones comprometan a su gobierno, al que sólo usted debe representar”, dice la nota
rmada por el exmandatario, que publicó en sus redes sociales.
Quiroga realizó declaraciones que generaron repercusión internacional en varios temas. Por ejemplo,
calicó de “cobarde matoncito” al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, haciendo
de esa frase tendencia mundial en Twitter en medio de un impasse diplomático por el asilo otorgado
a antiguos funcionarios del gobierno de Evo Morales.
Áñez designó a Quiroga como su delegado el 2 de diciembre con el objetivo que diera a conocer a
nivel internacional las denuncias por irregularidades en el conteo de votos elecciones del 20 de
octubre, en la que Morales se proclamó ganador y generó una crisis política que dejó 35 muertes.
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El 10 de noviembre Morales renunció y se fue asilado a México. Actualmente
tiene refugiado en Argentina.
Quiroga solo fue presidente de Bolivia durante un año: gobernó entre 2001 y
2002 después de que su predecessor, Hugo Bánzer, renunciara por
enfermedad.
Aunque Quiroga no explica las razones concretas de su alejamiento, en el texto
señala que el desafío actual es "discutir una propuesta de país" y que en este
año "demanda primero" que se converse en torno a aspectos como los "enormes desafíos" que se
enfrentan, las propuestas que hay y la forma en que se hará.
"Todos tenemos la obligación de aportar, orientar y participar en esta conversación nacional", señaló
en uno de los párrafos nales de su carta de dos páginas.
La designación de Quiroga (2001-2002) se efectuó el pasado 2 de diciembre como un canal para que
el Gobierno interino explique ante la comunidad internacional la situación de violencia que pasó
Bolivia después de las elecciones del 20 de octubre y que persistió luego de la dimisión de Evo
Morales el 10 de noviembre.
La tarea de Quiroga se enfocó principalmente es explicar los detalles sucedidos durante la crisis
boliviana principalmente a entidades internacionales como la Organización de Estados Americanos
(OEA) y la Unión Europea (UE).
El expresidente boliviano ofreció también algunas entrevistas a medios extranjeros en los que
además habló de lo que consideró la violación de los derechos humanos durante los casi catorce
años de Gobierno de Morales.
La presencia mediática de Quiroga menguó tras una rueda de prensa el pasado 26 de diciembre en la
que cuestionó con fuertes calicativos al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el
proceder de su Gobierno al otorgar asilo a Morales.
En aquel momento Bolivia y México afrontaban una fuerte tensión diplomática a causa de la
presencia policial en dependencias de la residencia mexicana en La Paz, donde se encuentran
asilados ex altos mandos del Gobierno de Morales, que fue calicada por el Gobierno del país
norteamericano como un "asedio
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