Toluca, México.- En el Estado de México si el siguiente año los partidos registran a las mujeres mayoritariamente en distritos electorales o municipios donde tienen baja votación, o incurren en inequidad en la distribución de los recursos para las campañas se considerará violencia política.
También el hecho de revelar información personal y privada de las mujeres que ejerzan una función pública o que aspiren a ella, con el objetivo de menoscabar su dignidad como seres humanos y utilizarla para obtener -contra su voluntad- la renuncia o licencia al cargo que ejercen o postulan; así como e incurrir en acoso, ataques físicos, violencia sexual en el ámbito del ejercicio político.
Varias fuerzas políticas han sido señaladas porque aprovechando vacíos legales postularon a mujeres para cumplir con cuotas, pero después ellas pidieron licencia y dejaron el cargo a hombres. También se ha acusado que los partidos dan candidaturas a mujeres en donde son menos competitivos, pero ahora, esas y otras conductas ya son reconocidas como una modalidad de violencia.
Las reformas aprobadas por los diputados locales hace unos días consideran que esa violencia se comete además por restringir el uso de la palabra en las sesiones u otras reuniones políticas en el ejercicio del derecho de petición o en órganos deliberantes; así como restringir la participación en comisiones, comités y otras instancias inherentes a su cargo o imponer sanciones injustificadas, impidiendo o restringiendo el ejercicio de sus derechos políticos.
Otra forma de violencia política será discriminar a la autoridad designada o en el ejercicio de la función pública, por encontrarse en estado de embarazo, parto o puerperio, impidiendo o negando el ejercicio de su función o el goce de sus derechos.
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