Ciudad de México. Durante el primer semestre de 2020 prevalecerán los datos negativos en torno a los niveles de inversión, construcción y producción industrial, advirtió este martes CIBanco.
En un reporte, la institución financiera afirmó que la economía mexicana seguirá con un menor dinamismo la primera mitad del año, toda vez que no se prevén cambios positivos con respecto a los datos observados a finales de 2019.
“La economía está estancada desde el último tercio de 2018”, refirió el área de estudios económicos de CIBanco.
Aunque, señaló, no hay elementos que apunten hacia una recuperación fuerte y rápida sobre el ritmo de crecimiento, la economía nacional “no va en picada”.
“Para 2020, la economía mexicana observará de nuevo una condición de estancamiento (crecimiento del PIB de 1 por ciento para todo el año), aunque en menor grado que lo registrado en 2019”, refirió el reporte.
CIBanco, precisó que, entre los factores que podrían jugar a favor del PIB este 2020 destaca la ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), acuerdo comercial que ayudará a reducir la incertidumbre para las inversiones.
Precisó, están los ajustes al alza sobre el salario mínimo, que puede mantener, junto con el gasto social que ejecute la administración, los niveles de consumo por encima de lo esperado.
También, apuntó, Puede ayudar el Acuerdo Nacional de a inversión en Infraestructura del Sector Privado, el cual ayudará a mejorar el ambiente de negocios y generar efectos multiplicadores.
CIBanco destacó que al país le favorece la disciplina fiscal y finanzas públicas sanas que propician el mantener la deuda pública estable como porcentaje del PIB, y por lo tanto, contribuye a la estabilidad financiera y cambiaria.
Incluso, argumentó, los bajos niveles de inflación registrados pueden provocar que el Banco de México recorte más su tasa de referencia y ello sirva como un incentivo a la economía, también contribuye el volumen de remesas que envían los connacionales al país.
Por otra parte, CIBanco aclaró qué hay un panorama complejo sobre los temas negativos que pueden inferir sobre el ritmo de la actividad económica, tales como la contracción de la inversión.
“Todavía luce complicado que se mejore el clima de negocios el cual se ha deteriorado desde finales de 2018, ante las señales contradictorias que sigue manando la Administración del Presidente López Obrador”, sostuvo.
El reporte detalló que, entre otros factores negativos para el rumbo de la actividad económica del país está una posible reducción de las calificaciones de México y Petróleos Mexicanos ante las agencias calificadoras de valores.
Por último, sentenció, están los temas de inseguridad pública que van al alza y una percepción de debilidad del Estado de derecho.
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