Desde las 09:00 horas comenzaron a reunirse los habitantes en el interior de dicho recinto, por lo que tomaron de sorpresa a los trabajadores del Ayuntamiento.
Los vecinos cerraron los dos accesos a fin de no permitir ni la entrada ni la salida de ningún trabajador hasta ser escuchados por el presidente municipal, Carlos González González, ya que de acuerdo a los inconformes, desde la noche se pidió ayuda y nadie acudió al llamado.
Una hora después del cierre del edificio, arribó el edil, pero los vecinos del Espino no le permitieron el acceso a su oficina hasta obtener una respuesta. Entre reclamos se pudo entablar un diálogo por alrededor de cuarenta minutos, donde se le pidió la intervención de motobombas para poder sacar el agua de sus propiedades, así como bajar el nivel de aguas negras en el drenaje, ya que estas comenzaron a entrar a sus viviendas.
Asimismo, solicitaron una campaña de vacunación en la zona a fin de evitar enfermedades respiratorias, principalmente en los menores, ya que el agua que inundó su localidad se contaminó con la del Río Lerma.
En un recorrido que realizó esta casa editorial con los habitantes y autoridades de este municipio, se constató que por lo menos el 80% de las calles y viviendas están afectadas y que para llegar a ellas el acceso es difícil, ya que el nivel de agua y los caminos de tierra lo dificultan.
Finalmente, las autoridades correspondientes se comprometieron a hacer los posible para bajar los límites de las aguas, no obstante se mencionó que las motobombas del municipio están descompuestas, por lo que se pedirá ayuda a otros municipios.
El alcalde, por su parte, prometió que llevar a cabo la construcción de un cárcamo pasando la temporada de lluvias o a la brevedad posible si las condiciones climáticas lo permiten.
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