El dolor de ojos, estornudos continuos así como malestares en garganta y vías respiratorias se pueden confundir con síntomas de una gripe sin embargo el origen de estos malestares puede radicar en la contaminación ambiental. Ante esta situación el doctor Mateo Ruiz señaló que es de suma importancia acudir al médico y no automedicarse.
Asimismo el especialista afirmó que la pésima calidad del aire, que en los últimos días se ha registrado en el Valle de México, afecta la vida de sus habitantes. como resultado de esto señaló que de acuerdo con datos de la Secretaría del Medio Ambiente federal y del Sistema de Monitoreo Atmosférico durante 2019 sólo hubo 15 días de buen aire, seis menos que en 2018.
Ante esta situación agregó que el problema de la contaminación del aire en el Valle de México lleva más de 30 años por lo que, a lo largo de todo este tiempo, los habitantes de esta zona han respirando partículas que afectan su salud
Dentro de los principales componentes de la contaminación del aire que afectan la salud de las personas son dióxido de nitrógeno (debido a la combustión de combustibles fósiles, como el carbón, el petróleo y el gas natural, el ozono debido al efecto de la luz solar sobre el dióxido de nitrógeno y los hidrocarburos y las partículas sólidas o líquidas en suspensión).
Agregó que la presente situación pueden provocar ataques en personas con asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Las enfermedades pulmonares relacionadas con la contaminación del aire aumentan el riesgo de trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos y pueden aumentar el riesgo de cáncer de pulmón.
Por tal motivo las personas que viven en zonas con mucha circulación de vehículos tienen un especial riesgo ya que las partículas atmosféricas contaminantes provocan que los músculos de las vías respiratorias se contraigan, lo que estrecha la vía (hiperreactividad bronquial).
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Entre los miembros de la población general, especialmente en niños, la exposición a largo plazo a la contaminación del aire puede aumentar las infecciones respiratorias y los síntomas de los trastornos respiratorios (como la tos y la dificultad para respirar) y disminuir la función pulmonar.
Detalló que el ozono, que es el componente principal de la bruma industrial (smog), es un fuerte irritante pulmonar. Los niveles tienden a ser más altos en verano, en comparación con otras temporadas y relativamente mayores al final de la mañana y al comienzo de la tarde, en comparación con otros momentos del día.
Las exposiciones a corto plazo causan dificultades respiratorias, dolor torácico e hiperreactividad de las vías respiratorias. Los niños que realizan actividades al aire libre los días en que la contaminación por ozono es alta son más propensos a desarrollar asma.
Finalmente recordó que la exposición prolongada al ozono causa una disminución permanente de la función pulmonar, en tanto que las partículas, llamadas óxidos de azufre, pueden provocar que las vías respiratorias se inflamen y se estrechen, registrándose síntomas como dificultad respiratoria y aumenta el riesgo de bronquitis crónica.
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