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miércoles, 18 de enero de 2023

El Metro es un síntoma

 


Un gobierno que dilapida el dinero de los mexicanos generando un empobrecimiento colectivo. | Julio Castillo

El Metro de la Ciudad de México que había sido ejemplo mundial de servicio, limpieza y seguridad, se encuentra en el peor momento de su historia, prueba de ello es que desde su inauguración y hasta 2019 se habían dado 3 accidentes relevantes, pero en lo que va del sexenio (y sumando hasta el 7 de enero) van 7, pero ¿qué está pasando?

Para empezar, no es un tema de seguridad pública (pero sí de seguridad nacional), si la Jefa de Gobierno creía que se resolvería algo con la Guardia Nacional ya se comprobó que no. Quizás ayuden para sacar a los que ponen carteles en contra de Claudia Sheinbaum o para que no rayen las paredes exigiendo justicia a las víctimas y un seguro de pasajeros, pero no van a evitar choques, desplomes, inundaciones y fallas.

El 7 de enero de 2023, chocaron dos trenes de Línea 3 dejando una joven muerta y 100 heridos (4 quedaron “prensadas” entre los vagones y 22 continúan hospitalizadas)… y la Jefa de Gobierno estaba de campaña en Michoacán.

La Ciudad de México tuvo un cambio político histórico en 1997, cuando se eligió al primer Jefe de Gobierno de la historia (antes el regente era como un secretario de Estado más que designaba el presidente de la República), hasta ese momento e incluso durante los 3 años de Cárdenas (primer Jefe de Gobierno electo) no se hicieron cambios en los presupuestos del Metro, pero entrando López Obrador en el año 2000 se empezaron a desviar recursos del Metro a las pensiones. El deterioro no fue inmediato, pero ahí empezó.

Para dejarlo con cifras y ejemplos: en 2003 (año electoral y bajo el gobierno de AMLO) el subejercicio del presupuesto del Metro fue de 14.9%, con Ebrard en 2009 (también elección intermedia) fue de 30.09% y con Mancera en 2018 (también intermedia) fue de 26.5%.

Sin tomar en cuenta los subejercicios, también ha existido una reducción real presupuestal que entre 2019 y 2021 redujo el 24% para mantenimiento (de 825 millones a 627).

El Metro fue una caja chica para varios gobiernos de la Ciudad de México, pero llegó el día en que todos esos abusos ya cobran factura y en lo que va del sexenio ha habido más accidentes que en los 50 años anteriores (desde 1969).

El Metro sufre lo mismo que sufren las carreteras, los aeropuertos (no el AIFA), las cárceles y todo lo que se mantiene con presupuesto federal: mal estado por falta de mantenimiento. Ese es el resultado de un gobierno que desvía recursos millonarios para conseguir apoyo social de los más pobres (reconocido abiertamente por López Obrador) mientras cada vez son peor pagados los trabajos, se quitan los seguros, las escuelas están abandonadas, las carreteras en mal estado, los hospitales se caen y no tienen medicinas… en fin un gobierno que dilapida el dinero de los mexicanos generando un empobrecimiento colectivo.

 

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