El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no es un pase automático a la modernidad, es una herramienta, dijo Juan Pablo Castañón Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
"Sí estamos en el camino adecuado, estamos negociado técnicamente cuál es el futuro de la relación bilateral y trilateral”, pero el acuerdo “no es un pase automático a la modernidad”, aseguró el empresario.
Al participar durante el acto inaugural del Sexto Foro de Consulta Infraestructura 2030, organizado por la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Castañón dijo que por lo anterior
En la modernización de pacto, agregó, se requiere de voluntad, acuerdos políticos e infraestructura y de complementos como facilidades para las empresas; políticas públicas que generen confianza de largo plazo; desregulación; respeto al estado de derecho; certeza a la propiedad pública y privada y seguridad.
"El Tratado de Libre Comercio es tan sólo una herramienta, pero no es un pase automático a la modernidad en los retos de este siglo; le da continuidad a la apertura de un México que requiere la conectividad con el mundo”, señaló.
El TLC puede y debe dar esas herramientas, pero sin perder de vista las necesidades de diversificación.
"Pero eso no es automático, el progreso no se nos dará automáticamente al firmar los acuerdos, simplemente es una herramienta”, sostuvo.
Destacó que, entre los empresarios de México, Estados Unidos y Canadá, destaca el compromiso de impulsar a los gobiernos de los tres países a acordar las sinergias necesarias en políticas públicas, a fin de que América del Norte sea la región más competitiva del mundo en materia energética.
Para el caso de México, precisó que se requiere de acceso a la tecnología y de una agenda complementaria para los próximos 10 años, en materia de fomento energético, contenido nacional y capacitación para los pequeños y medianos empresarios.
Lo cual debe de ir aunado a carreras profesionales, en las que las universidades y tecnológicos preparen a jóvenes especializados en materia energética.
Castañón recordó que México tiene tratados comerciales con 46 países, pero también la oportunidad de diversificar mercados y no sólo para exportar, sino también para permitir que expresas extranjeras vengan al país a invertir, a hacer sinergia entre pequeñas y medianas empresas y a conectar a jóvenes de diferentes partes del mundo.
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