La universidad informó en un comunicado lo sucedido y expresó su repudio ante cualquier hecho ilícito cometido en sus instalaciones, además aseguró colaborará para esclarecer el hecho.
La mujer fue descubierta, atada a una caseta de teléfono público, por personal de vigilancia, quienes dieron aviso de inmediato a la agencia del ministerio público de la procuraduría capitalina.
Ante estos hechos, la Universidad expresó en un comunicado “su repudio a cualquier tipo de ilícito cometido en sus instalaciones, mantendrá su disposición a colaborar con la autoridad competente y estará atenta a los resultados de las investigaciones”.
Elementos de la Policía de Investigación realizan trabajos para esclarecer la muerte de la mujer, de aproximadamente 25 años, cuya identidad no se sabía, hasta el cierre de la edición, debido a que entre sus ropas no halló identificación alguna. De acuerdo con los primeros reportes, inscritos en el expediente FCY/COY-1/UI-1C/D/1099/05-2017, alrededor de las 07:00 horas se reportó el hallazgo de la joven con el cable telefónico público atado al cuello. También se halló la cadena de un perro.
Al tener conocimiento de los hechos, el agente del Ministerio Público de la Coordinación Territorial COY-1 inició carpeta de investigación por el delito de homicidio y activó inmediatamente el protocolo de feminicidio para estos casos.
Agentes ministeriales y personal de la Coordinación General de Servicios Periciales intervinieron en el lugar a fin de recabar indicios, como parte de las primeras indagatorias del caso.
Posteriormente, trasladaron el cadáver de la víctima a bordo de la ambulancia de Servicios Periciales de la Procuraduría capitalina, placas 2967, al anfiteatro delegacional, donde se espera que acudan familiares a identificarla.
Hasta la agencia 32 del Ministerio Público en Coyoacán se presentó Teresa Ermenegildo, jefa de unidad de apoyo jurídico a la UNAM, quien se comprometió a colaborar con las autoridades para esclarecer el hecho.
El representante social continúa las investigaciones que permitan esclarecer este ilícito y evitar impunidad.
Estudiantes y profesores de la UNAM se dijeron consternados por estos hechos, pero reconocieron que la seguridad en la máxima casa de estudios se ha deteriorado, pues cada vez son más comunes delitos como el robo con violencia a transeúnte y vehículos, entre otros.
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