Francisco Rivas, presidente del ONC, dijo que el deterioro no es en una zona sino de todo el país, pues 28 de las 32 entidades han visto mermado su nivel de seguridad.
Toma clandestina detectada en el Estado de México
Andrés Manuel López Obrador recibirá un país “en absoluto desastre” en materia de seguridad, por lo que debe tomar decisiones inmediatas para revertir los altos índices de criminalidad, señalaron especialistas.
Consideraron, sin embargo, que los resultados no serán a corto ni mediano plazo, ya que la baja en la incidencia delictiva dependerá de la estrategia del próximo gobierno, la cual aún no se conoce totalmente.
Señalaron que es casi imposible que se cumpla el plazo de 180 días para ver un “punto de inflexión” en materia de seguridad, como ofreció Alfonso Durazo, futuro titular de la Secretaría de Seguridad Pública.
Francisco Rivas, presidente del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), dijo que el deterioro no es en una zona sino de todo el país, pues 28 de las 32 entidades han visto mermado su nivel de seguridad.
Consideró que la administración entrante debe buscar una mejora institucional en las policías y dependencias de procuración y administración de justicia que han sido olvidadas.
Además de que las corporaciones policiacas, particularmente las estatales y municipales; así como las dependencias de procuración de justicia se encuentran en una profunda crisis institucional.
Explicó que el gobierno de López Obrador debe priorizar a la atención en el combate a delitos como el robo de hidrocarburo, robo de vehículo y narcomenudeo.
Y es que consideró que son esos delitos los que están detonando la incidencia de otros ilícitos de mayor impacto, como el secuestro y homicidio en zonas claramente focalizadas en el territorio nacional.
“En el caso del robo de hidrocarburo (huachicoleo), Puebla y Guanajuato son claros ejemplos, ahí crece este delito de manera paralela a otros como homicidios, feminicidios y desaparición de personas”, advirtió.
Agregó que de manera paralela se debe dignificar a las instituciones de seguridad y procuración de justicia, depurarlas, profesionalizarlas, dotarlas de equipo y pagar salarios dignos. “Hoy nadie quiere ser policía, no por falta de vocación, sino porque no hay garantía para lograr un proyecto de vida digno”, dijo.
Samuel González, exsubprocurador de la PGR, aseguró que el problema de la policía en México no es de recursos, sino de capacidad de los gobiernos. Recordó que en los últimos 25 años México ha gastado decenas de miles de millones de dólares en sus policías, y los gobiernos no han logrado profesionalizarlas ni abatir el delito.
Dijo que el problema es que se han dado “bandazos”, pues no se hicieron diagnósticos ni propuestas claras y contundentes y advirtió que mientras la autoridad es vulnerable ante la delincuencia, se infiltra y cede su poder institucional al crimen.
Directorio
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario