Tendrá facultades para intervenir o desintegrar, por oficio, cualquier cuerpo policial corrupto o ineficiente
Senado de la República decidió que el Secretariado Ejecutivo del Consejo de Seguridad Pública será el gran poder en la elevación a norma constitucional del mando único policial, pues no sólo será el responsable de capacitar, evaluar y auditar a los cuerpos policiales en los tres niveles de gobierno, sino que tendrá facultades para intervenir o desintegrar, por oficio, cualquier cuerpo policial corrupto o ineficiente.
De acuerdo con el proyecto de dictamen que este lunes discuten las comisiones del Senado, para por fin aprobar las reglas del mando único policial, que los panistas insisten en llamar mando mixto, el Secretariado Ejecutivo del Consejo podrá ordenar la remoción de los mandos policiacos y a petición de algún gobierno o por oficio, podrá destituir los cuerpos policiales.
“El titular del Ejecutivo de cualquier orden de gobierno podrá solicitar al Secretariado Ejecutivo la delegación temporal del ejercicio de la función de seguridad pública a cargo de las instituciones policiales de los municipios y de las entidades federativas, por incapacidad o cualquier otra situación que afecte de forma relevante la prestación de dicho servicio.
“En términos de lo que establezca la ley general de la materia, el Secretariado determinará su procedencia, las condiciones de coordinación subsidiaria, su temporalidad, las responsabilidades de los órdenes de gobierno, así como los requisitos para la reasunción en las funciones delegadas, siempre que se cuente con la certificación que corresponda. El Secretariado Ejecutivo podrá ejercer de oficio esta competencia”, ordena la reforma constitucional.
También advierte que “cuando la institución policial evaluada o auditada incumpla con dicha recomendaciones y observaciones, el Secretariado Ejecutivo podrá designar un responsable de supervisar la implementación de las medidas correctivas.
“De igual forma, podrá determinar la intervención de la institución o de un área de la misma, cuando incumpla de manera reiterada las bases del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
“La intervención consistirá en la remoción de mandos, su reestructuración organizacional o de procedimientos y las demás que establezca la ley en la materia”, dice la reforma constitucional que hoy se aprueba en comisiones.
Y aunque el Partido Acción Nacional se ha empeñado en los últimos meses en no llamarle mando único, sino mando mixto, la reforma no hace referencia a ninguno de los dos términos, pero sí eleva a nivel constitucional el concepto de mando único que se aplica desde hace años en los estados, tal como lo pidieron los gobernadores.
El numeral VII del artículo 21 constitucional dice que en materia de seguridad pública estará “la obligación de las instituciones policiales de las entidades federativas de actuar bajo el mando de las federales y de las municipales bajo el mando de las estatales o federales, en los términos y condiciones que determine la ley en la materia”.
Mientras la añeja propuesta realizada por el expresidente Felipe Calderón Hinojosa establece que la decisión de proceder o no con un mando único debía ser del Secretario de Seguridad
Pública, y la propuesta del presidente Enrique Peña Nieto era que esa decisión fuera producto de un proceso en el que participen los poderes Legislativo y Ejecutivo estatales y federal, la reforma acordada en el Senado establece que será responsabilidad del Secretariado
Ejecutivo.
Este Secretariado Ejecutivo será nombrado con el voto de las dos terceras partes del pleno del Senado de la República, a propuesta del Presidente de México y tendrá un Consejo Consultivo, el cual será integrado por cinco ciudadanos, también nombrados por el Senado.
Las propuestas
La propuesta del entonces presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, establecía que la decisión de proceder o no con un mando único debía ser del Secretario de Seguridad Pública.
La propuesta del ahora presidente Enrique Peña Nieto era que esa decisión fuera producto de un proceso en el que participen los poderes Legislativo y Ejecutivo, tanto los estatales como el federal; la reforma acordada en el Senado establece que será responsabilidad del
Secretariado.
Este Secretariado Ejecutivo será nombrado con el voto de las dos terceras partes del pleno del Senado de la
República, a propuesta del Presidente.
Además, el Secretariado tendrá un Consejo Consultivo integrado por cinco ciudadanos, también nombrados por el Senado.
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