En entrevista, el sacerdote señaló que el tiempo ha sido un factor importante en esa actividad, pues es difícil para los menores y sus progenitores esperar un lapso amplio para realizar ese sacramento.
No obstante, insistió en que la catequesis escolarizada es una buena idea y un buen método, pero la Iglesia debe verlo como práctico y, en el sentido pastoral, hasta dónde de verdad lo es y si ayuda a los niños.
De acuerdo con el decreto emitido por la diócesis de Toluca, este tipo de catequesis entró en vigor hace un año con tres cursos para niños de seis a ocho años de edad. En 2015, se hará lo propio en cantidad para menores de nueve a 12 años, y en 2016, se prevé implementar la catequesis a pequeños de cuatro a seis años.
Explicó que ese tipo de catecismo abarca seis años, tal como sucede con la educación primaria, lo cual para muchas personas ha representado un obstáculo por la cantidad, el periodo que implica el proceso.
Al respecto, manifestó "jerarquía va a decir que hay tiempo para todo y que si somos cristianos debemos prepararnos", en eso estoy de acuerdo, pero se debe buscar una pedagogía y una psicología adecuada para ofrecerla a la gente, no todo de tajo.
El padre Carmona consideró que se debe seguir con lo tradicional e ir poco a poco con la implementación del sistema escolarizado, con el fin que las familias se acostumbren a ese sistema de enseñanza y no haya una separación con la Iglesia.
"Antes, por lo menos para hacer la primera comunión, se acercaban, ahora cada día se retiran más y más, porque no hemos usado la pedagogía y psicología en la pastoral y en la catequesis, debemos ser pastores y ver qué necesidades tienen nuestras ovejas", sostuvo.
Insistió en lo necesario que resulta que los sacerdotes y la Iglesia local busquen ser pastores para estar más cerca del rebaño y de la gente para que valore su cristianismo y su catolicismo, lo cual los motivará a prepararse cada día más.
No hay comentarios :
Publicar un comentario