Por una parte, en un comunicado de prensa por parte de la Coprisem se informó que se suspendió de forma total en Centro de Control Animal y Vigilancia Epizootiológica a cargo del ayuntamiento de Coacalco, por no cumplir con medidas sanitarias, ni la documentación necesaria para su operación.
El titular de Coprisem, Fernando Díaz Juárez explicó que el lugar representaba un riesgo a la salud de los trabajadores y vecinos de la comunidad al no tener un control adecuado de heces de los perros, “además de que o había un buen trato a las mascotas”.
Se establece que el lugar se revisó en coordinación con personal de la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (PROPAEM) y de la Asociación de Protección del Perro Callejero “Pro Perro”, debido a que “recibimos una denuncia ciudadana a través del Centro Integral de Servicios de la Coprisem, por lo que el grupo de verificadores acudió a las instalaciones donde se constató las irregularidades que motivaron la suspensión”, aseveró el comisionado.
El lugar se ubica sobre avenida Presidentes en la unidad habitacional San Rafael.
En el comunicado se consignó que tras la verificación del local, habilitado como Centro de Control Animal, el personal no acreditó la documentación de control de fauna nociva, el aviso de funcionamiento y de responsable sanitario, ni sus carnets de vacunación, como marca la ley.
Por tales motivos, se suspendieron las actividades y servicios como medida de seguridad sanitaria en todo el inmueble, hasta que el ayuntamiento subsane las deficiencias encontradas.
Se señaló que mientras esto ocurre, la PROPAEM trasladó a los animales que se encontraban en este centro al Hospital de Pequeñas Especies de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UAEM para su resguardo y tratamiento adecuado.
En entrevista por separado, el munícipe coacalquense, David Sánchez Isidoro afirmó que ya se trabaja para su reapertura, “es una situación ajena a nuestro municipio, de agrupaciones protectoras de animales y le hemos dado la prioridad a un daño que se ocasionó en Bosques del Valle, donde un bebé de tres o cuatro años fue sorprendido por unos animalitos, que casi le desgarran la pierna, para mí ese es un tema de humanidad”.
El presidente municipal explicó que por capturar a esos perros y retenerlos, los dueños, “que actuaron de forma irresponsable, al no cuidar sus perros”, se quejaron a través de redes sociales con el gobierno del Estado de México, con la PROPAEM, situación que generó la clausura del Centro de Control Canino.
Aclaró que se cuenta con las medidas de seguridad básicas, “con errores, deficiencias, por la falta de recursos económicos, tal vez para tener un espacio digno para los animales”, lo que ha permitido que por más de 10 años en Coacalco gracias al antirrábico, no se presente ningún problema de rabia en el municipio.
Por ello, confío en que las autoridades correspondientes, reanalicen el tema para que las instalaciones sean reabiertas y que no por comentarios de algunas personas que se molestaron por la captura de canes que atacaron a un bebé, las instalaciones sigan cerradas.
Agregó que para subsanar los faltantes en el antirrábico tendrán que invertir algún dinero, mismo con el que no cuentan en este momento, por lo que ya están en pláticas con las autoridades por las observaciones que les hicieron y de esta forma reparar lo errores en el transcurso de este mes.
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