La austeridad impactó al programa Sembrando Vida, los servidores públicos, operadores del programa son los que a pesar de estar contratados por honorarios, deben pagar copias, papel, impresiones y material para el archivo de expedientes, así como todo lo requerido para la integración de expedientes de beneficiarios y los materiales que utilizan para hacer sus reportes públicos, tales como rotafolios y proyectores, entre otros, de su propio bolsillo, dio a conocer el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política Pública de Desarrollo Social (Coneval).
“Los técnicos del programa son personal contratado por honorarios, desde el inicio de su contratación se les informó que era necesario que cubriesen ciertos gastos, así como adquirir los equipos para realizar sus actividades, esto es una práctica habitual con personal que es contratado por honorarios”.
En los últimos días se conoció que en la Secretaría de Economía los trabajadores deberán compartir las computadoras para realizar su trabajo, en el caso de los programas sociales la austeridad se traduce en el caso del programa Sembrando Vida, a cargo de la Secretaría de Bienestar, el gasto de gestión administrativa corre a cargo de los trabajadores encargados del registro y supervisión del mismo.
Se dio a conocer que en el primer año de operación de Sembrando Vida el gobierno de López Obrador descontó a 250 mil campesinos 500 pesos del apoyo que recibieron a fin de promover el ahorro familiar y crear un fondo de bienestar, sólo que el Coneval encontró que hasta ahora les beneficiarios “no cuentan con un documento legal para comprobar dicho ahorro” y tampoco se especifica a qué institución deben acudir a solicitar esos recursos.
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