Más del 50 por ciento corresponden al sector industrial y otro porcentaje menor al comercial
A partir de la contingencia sanitaria por la pandemia de Covid-19, alrededor del 60% de la clase trabajadora ha sido despedida injustificadamente, mientras que otro 20% conservan su trabajo pero con la percepción del 50% de su sueldo y el 20 restante fueron suspendidos sin goce de sueldo bajo la promesa de recuperar su empleo al término de la contingencia, informó el presidente del Colegio de Abogados del Estado de México, Enrique Gabriel Lazaga Yamín.
Este cien por ciento se traduce en cerca de 400 casos en los que ya se inició un proceso legal, los cuales en su mayoría están en el Valle de Toluca.
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“El Consejo de Salubridad General no ha decretado una posición al respecto (de la suspensión de labores y bajo qué términos), él dijo que se tomen las medidas precautorias para que no se propague el virus, y nada más, pero no han decretado el estado de excepción, no han decretado medidas cautelares para las empresas, nada. Y tienen a todo el mundo en la incertidumbre jurídica y mientras no se decrete el despido es ilegal”, explicó el abogado de profesión.
Ante este panorama, el Colegio de Abogados de la entidad prevé un incremento todavía mayor de estos casos al término de la contingencia sanitaria.
Lazaga Yamín también expuso que incluso existe la posibilidad de que gran porcentaje de los trabajadores que fueron suspendidos de forma temporal sin goce de sueldo con la promesa de recuperar su empleo, nunca lo logren, pues cientos de unidades económicas probablemente ya habrán colapsado y desaparecido.
En entrevista con El Sol de Toluca, el abogado declaró que la mayoría de los casos jurídicos por despido injustificado y otros, pertenecen a la iniciativa privada, de los cuales más del 50% corresponden al sector industrial y otro porcentaje menor al comercial.
Recientemente empresarios que conforman el Consejo Coordinador del Estado de México (CCEM) y la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur), reconocieron estar al límite de su liquidez, pues suman ya siete semanas que los establecimientos que realizan actividades consideradas no esenciales, pararon sus labores hasta nuevo aviso, derivado de la contingencia sanitaria.
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Por ello, lanzaron un llamado a autoridades estatales y federales para bajar los apoyos que prometieron al inicio de esta emergencia sanitaria por Covid-19, pues se trata de un “respiro” para la supervivencia de miles de unidades económicas mexiquenses.
En este contexto el presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes (Asbar) del Estado de México, Patricio González Suárez, reconoció que en el sector que representa todavía no hay demandas ni pleitos de otra índole entre empleadores y trabajadores, sin embargo, a éstos últimos no se les está pagando al cien por ciento.
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