* Vendedores irregulares se comen al pueblo Mágico de Tepotzotlán
Hasta el momento no existe certeza alguna sobre el futuro inmediato y posterior de los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Revolucionario Institucional (PRI), aunque los más avezados aseguran que cada uno de ellos seguirá su caída en picada, sin posibilidades de tener una recuperación en los comicios que vendrán.
La herida profunda, ocasionada en las elecciones del pasado julio resultó de extrema gravedad al grado de que los tiene postrados sin conseguir establecer un rumbo o al menos un diagnóstico real y crudo de lo que pasó.
Nada más es cuestión de observar lo que acontece en suelo mexiquense, en donde el más afectado resulto ser el Partido de la Revolución Democrática, el cual con base en las prerrogativas que le fueron entregadas por parte del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), compró y construyó un edificio en las inmediaciones de la Glorieta Colón luego de que Ricardo Moreno, antiguo dueño de la casa que arrendaba el PRD como sede estatal, cambio de grupo y se pasó al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
De esta manera, los miembros del Sol Azteca anduvieron errantes por un tiempo, luego buscaron y buscaron y como tribu azteca encontraron la señal requerida: un gran inmueble, desocupado, en el abandono total.
La propiedad, cercana a Casa Estado de México se ubica a unos metros de donde convergen Colón y Tollocány ahí empezaron a levantar un amplio edificio.
Por el momento, en el inmueble se detuvieron las obras y no podrá ser ocupado en un cien por ciento, de tal manera que, con la situación actual del PRD, quizá tenga otro final, pues los pronósticos indican que el Partido del Sol Azteca seguirá su camino en caída libre como resultado de las broncas internas y las diferencias entre líderes que los ha llevado a perder fuerza.
Por lo que toca al PAN, las cosas pintan un poco mejor. Los dirigentes se encuentran dispuestos al sacrificio y hacer a un lado su orgullo y vanidad para empezar a reconstruirse.
Mientras que el PRI, aún no logra aprender que se encuentran noqueados y sin posibilidades de levantarse si primero no avientan la toalla y toman un respiro para desterrar prácticas insanas que han provocado enconos y enfrentamientos.
Deben entender que la disciplina no lo es todo y que basta que uno de sus integrantes, con calidad moral, levante la voz con firmeza para que empiecen a refundarse, el problema es quién empezará el fuego.
Pobre Toluca, no parece la capital del Estado de México, ni siquiera una gran ciudad en desarrollo. Sus calles, avenidas y accesos parecen áreas minadas y debido a que Fernando Zamora, alcalde saliente ya cuenta las horas para dejar el cargo, todo mundo se hace el desentendido.
Hasta el momento se desconoce qué plan aplicará Juan Rodolfo Sánchez Gómez para atender los problemas crónicos de comercio ambulante que enfrenta Toluca. Cualquier punto como Centro, Tollocan, Alfredo del Mazo, Central Camionera, Nicolás San Juan y muchos más, se encuentran infestados de vendedores.
Pero el tema no es exclusivo de Toluca, lo tiene también Naucalpan y Tepotzotlán, por cierto, gravemente dañada por ordas de comerciantes que, bajo el amparo de la impunidad, proliferan en las calles de este pueblo mágico, al que parecen absorber.
Y grave situación económica enfrentan los municipios del Estado de México, pues no tienen recursos y se vislumbra que, con la llegada de los relevos, las demandas ante tribunales por despidos injustificados se acrecentarán.
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