El país se ubica entre aquellos donde el impuesto sobre la renta y por seguridad social representan un gran porcentaje de los salarios de los empleados.
Si vives en México y crees que pagas un alto impuesto por lo que ganas, no te equivocas y el estudio Taxing Waves de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) lo demuestra.
El país se ubicó entre las naciones de la OCDE donde el impuesto sobre la renta y las retenciones por seguridad social representaron para los trabajadores un alto porcentaje de sus ingresos en 2017.
De acuerdo con el estudio, que analiza los gravámenes pagados en los 35 países que conforman el organismo internacional, el pago del impuesto sobre la renta representa el 9.8 por ciento de los ingresos salariales brutos de los trabajadores mexicanos.
Mientras que el pago de las contribuciones de seguridad social significa el 11.2 por ciento de los ingresos de los mexicanos.
Aunque el país se ubica por debajo de otras naciones como Alemania, donde los trabajadores cubren el impuesto sobre la renta con el 19.1 por ciento de sus ingresos, y la seguridad social con el 20.8 por ciento de lo que perciben.
"A pesar de eso, los alemanes obtienen algo a cambio, como seguro de salud, pensiones, cuidado de ancianos y beneficios de desempleo", señala Statista, el sitio especializado en estadísticas, que retomó el estudio de la OCDE.
Mientras que en Italia, estos dos rubros representan 21.7 por ciento y 9.5 por ciento de los ingresos brutos de los trabajadores.
Y en Francia, estos dos tipos de retenciones significan que los empleados dejan de percibir el 14.8 y 14.4 por ciento de sus ingresos brutos, de acuerdo con el estudio de la OCDE publicado la semana pasada.
En la lista elaborado por Statista se tomaron en cuenta el impuesto sobre la renta y las contribuciones a la seguridad social pagadas por los empleados que no tienen beneficios fiscales.
En 2017, la porción promedio de los salarios brutos pagados en impuestos en la OCDE fue del 25.5 por ciento. Hay una diferencia considerable en las tasas impositivas entre los países y dependen en gran medida de las ganancias y el estado familiar.
El objetivo del estudio de la OCDE es mostrar cómo el impuesto sobre la renta y las contribuciones para los beneficios sociales y otros impuestos impactan los ingresos de los hogares.
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