A través de un video grabado en el despacho presidencial, Peña Nieto reconoció que en México persisten dos realidades.
"Por un lado, un país moderno con altos niveles de vida, por el otro, uno de carencias y marginación, esta es la división más profunda en nuestro país.
"Vivir en pobreza significa no sólo tener un ingreso insuficiente sino también no poder ejercer derechos fundamentales como la educación, salud, seguridad social, vivienda digna o alimentación adecuada".
Destacó que gracias a las acciones emprendidas en los últimos 25 años la situación ha logrado revertirse.
Por ejemplo, entre 1990 y 2015 disminuyó en un tercio el porcentaje de personas sin educación básica.
También, agregó, se duplicó el acceso a servicios de salud, se redujo a una quinta parte el número de personas que vivían en casas con piso de tierra o sin drenaje y a una sexta parte las que habitaban viviendas con techos precarios.
Hoy, 99 de cada 100 personas cuenta con electricidad en sus hogares.
"En esta administración la Estrategia Nacional de Inclusión está cumpliendo aún más rápidamente el ejercicio de los derechos sociales y se han creado casi 3 millones de empleos que es la mejor manera de combatir la pobreza.
"Gracias a esos esfuerzos las carencias sociales en México están en su menor nivel en nuestra historia y siguen disminuyendo", subrayó.
El presidente de la República afirmó que desde la creación de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) hace 25 años se trabaja para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos.
"Falta mucho por hacer, pero nuestro país ha avanzado en el combate a la pobreza.
"No sólo son cifras, sino historias de bienestar y de esperanza para millones de mexicanos", apuntó el Ejecutivo.
Finalmente, felicitó el trabajo de esta dependencia "para hacer de México un país más justo, incluyente y próspero".
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