Los avances tecnológicos han facilitado cada vez más nuestro acceso alentretenimiento de forma más segura y barata, lo que ha orillado que el mercado del formato físico (DVD y Blu-ray) se intente adecuar –sin mucho éxito- al nuevo negocio que domina la industria.
En los últimos cinco años el negocio del audiovisual físico ha decrecido 65% y tan sólo el último año tuvo una caída de 31%, lo que ocasionó que las oficinas de algunos estudios hayan cerrado o se hayan reagrupado.
Hace dos meses, 20th Century Fox Home Entertainment anunció que cerraba sus oficinas en México y ahora sería Warner Home Entertainment quien se encargue de distribuir su material.
Todo esto a raíz de que el costo de operación de sus oficinas era superior a lo que la marca vendía de sus productos físicos.
Aparte de Fox y Disney, también Paramount, Sony y Universal Pictures hicieron una alianza similar para seguir manteniendo el negocio a flote.
Esta tendencia no sólo ocurre en México, sino a nivel global, puesto que en los últimos cinco años el formato físico ha decrecido 50%, mientras que en países en vías de desarrollo y territorios de Sudamérica se ha incrementado hasta llegar incluso a bajas mayores a 70%.
Quizás la causa más importante de este fenómeno es la gran penetración que el internet tiene hoy en día en todo el mundo en conjunto con la economía de cada país, lo que hace muy costoso al consumidor comprar un DVD o Blu-ray.
Sin embargo en México, aparentemente, adquirir el formato físico proporciona al comprador cierto sentido de pertenencia, como tener un libro o un disco, para el cliente tener una colección es importante; por lo que los distribuidores tratan de preservar esta sensación para mantener sus ventas a flote.
En la década de los ochenta, la aparición de las videograbadoras de betamax y VHS, desencadenó una serie de cambios en el acceso al entretenimiento, y una latente amenaza a la industria cinematográfica que cada cierto tiempo se toma un aire para renovarse como lo hace ahora con Netflix, el gigante del entretenimiento por streaming.
El streaming de video se popularizó a fines de la década de 2000, cuando el ancho de banda se hizo lo suficientemente barato para gran parte de la población mundial, pues con la tecnología del streaming un archivo puede descargarse y reproducirse al mismo tiempo, con lo que el tiempo de espera es mínimo, lo que dio origen a un sinnúmero de blogs de descarga gratuita que desafiaban las leyes de distribución de las casas productoras e incluso a llegaron a hacer fuerte competencia con la piratería.
Muchos de estos blogs de descarga eran de origen argentino o sueco, entre los más relevantes se encontraban http://www.cuevana2.tv/ o https://cultmoviezinfo.wordpress.com/, además del controversial sitio de descargas ilegales https://thepiratebay.se/, cuyos creadores han sido objeto de persecución y procesamiento legal en tribunales internacionales por desafiar las leyes de derecho de autor y distribución de material de entretenimiento.
A raíz de este fenómeno, la industria del entretenimiento se ha visto orillada a seguir la tendencia de la distribución digital, es así como se origina Netflix, que se consolida en nuestro país con un número de usuarios superior a 500.000, con una oferta exageradamente variada en programación. Sin embargo el hecho de que no cuenta con un solo empleado en México ha generado cierto malestar entre los trabajadores del gremio, por lo que no ha tardado en surgir una especie de alternativa a la mexicana: Blim.
La oferta de este sitio, auspiciado por Televisa, es mucho menor y se centra casi exclusivamente en producciones de la misma cadena que difícilmente podrían competir con la extensa oferta del gigante gringo del entretenimiento digital.
Este intento de competencia dio origen a una avalancha de memes en los que los usuarios de redes sociales cuestionaban la calidad de la oferta del portal mexicano comparándolo con lo que ofrece el estadounidense.
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