El sicario sentenciado es Uriel Ramón Espinoza Sánchez, alias “El Niñote”, de 20 años, quien pertenece al grupo criminal Guerreros Unidos, a quien le ordenaron ejecutar a la cajera Rebeca Díaz García, de 26 años, quien era esposa de un líder del grupo criminal Los Rojos, a quien asesinaron tres meses antes que a ella
El fiscal general Rodrigo Dorantes Salgado explicó que “no sabemos si posteriormente le vayan a cumplimentar una orden de aprehensión por delincuencia organizada, ya que se presume que esta persona trabajaba para un grupo criminal que abatió a la víctima, porque tenía relación con otro grupo criminal contrario; entonces ya sería la PGR quien determine eso, pero por lo que es el homicidio o feminicidio ya se le cumplió esta sentencia”.
A pesar de la gravedad de su delito, la sentencia fue mínima debido al beneficio que la ley de Morelos otorga a quienes se acogen a los llamados juicios abreviados, que consiste en aceptar su participación en los delitos y reconocerlos ante el juez.
“El juicio abreviado nos acorta el tiempo; nos da la ya certidumbre de una sentencia condenatoria firme, y no un juicio largo que a veces, con mucho respeto, ciertas autoridades no todas jurisdiccionales, pues tienen criterios que no compartimos y que pasan cosas que no queremos apelar o interponer un recurso.”
Pese a la condena, el fiscal no quiso dar detalles de quienes habían ordenado a “El Niñote” matar a la cajera. “Bueno literalmente no le puedo decir como refirió, pero lo importante es que él está siendo procesado por otro robo, tiene dos causas: una ya sentenciada y otra por un robo grave y que también la Federación, en este caso la PGR, lo tiene investigando”.
La víctima trabajaba en una tienda comercial ubicada en avenida Ávila Camacho, de la colonia La Pradera, cuando fue privada de la vida por el hoy imputado, quien se introdujo a dicho establecimiento para disparar en dos ocasiones en contra de la mujer, para posteriormente huir.
Resultado de las indagatorias, se logró identificar a Uriel Ramón como quien presuntamente disparó a quemarropa en cuatro ocasiones contra la cajera, razón por la cual la Fiscalía solicitó al juez orden de aprehensión, la cual fue cumplimentada en las instalaciones de SEIDO en la Ciudad de México, lugar donde se encontraba arraigado tras haber sido asegurado por la Policía Federal, por integrar una banda dedicada a la extorsión y al secuestro.
Cabe destacar que el ahora sentenciado enfrenta un segundo proceso por robo calificado por su participación, junto con Bonifacio “N” y Carlos Sebastián “N, en hechos ocurridos el 24 de marzo de este año, en una gasolinera ubicada en la avenida Emiliano Zapata, de la colonia Los Pinos, del municipio de Jiutepec.
Durante la audiencia de procedimiento abreviado, el juez impuso al responsable una multa de más de un millón de pesos y el pago de la reparación del daño, por más o menos la misma cantidad.
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