Cuando estoy a punto de cumplir 70 años decidí sacar del
baúl del recuerdo algunas anécdotas de mi vida en el ámbito periodístico.
Recuerdo mi debut como reportero de nota roja para el
periódico xalapeño, EL COMENTARIO y el "bautizo" que me dieron, que
bárbaro fue escalofriante.
Viaje de Coatepec a Xalapa en una carroza en la parte
posterior con un cuerpo destrozado
En la camilla se veía el rostro destrozado con los ojos
saltones, las vísceras regadas, (Guacala) es decir intestinos, las piernas
hechas añicos y yo sentado en la camilla.
Fue algo espantoso, que cuando llegué a casa me tuve que
bañar y tirar la ropa que se había manchado de sangre y excrementó.
Pero así pague mi novatada de reportero policíaco.
Sin embargo, debo reconocer que de ahí se fue conformando mi
pasión por el periodismo, que alguna vez dejé para hacer política e incursionar
en el servicio público.
Pero está noble profesión, que yo conozco como periodismo a
sido mii pasión, aunque ahora ya le llaman de diferente manera.
Bueno, mañana platicare mi experiencia como redactor de
boletines del gobierno del estado de Veracruz y vocero del entonces gobernador
Don Rafael Hernández Ochoa
No vemos mañana…
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