La nueva secretaria afirma que preparará un “diagnóstico continuo” para determinar el rezago educativo y el abandono escolar causado por la pandemia de la covid-19 en México
La maestra Delfina Gómez ha asumido este lunes la jefatura de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
La nueva secretaria se convierte en la segunda mujer que ocupa el puesto y lo
hace con un enorme reto por delante: debe garantizar la apertura de las escuelas en medio de la
pandemia de la covid-19. Gómez, de 58 años, ha definido el regreso a los
planteles como su principal objetivo y ha asegurado que buscará “las condiciones de limpieza, salubridad, infraestructura y
recursos” para que las clases se retomen de manera segura. Gómez no ha
puesto fecha para el retorno a las aulas y dijo que este estará sujeto al
semáforo epidemiológico de cada Estado. Hasta hoy, solo una de las 32 entidades
del país está en verde, el color que representa el menor riesgo.
Gómez fue presentada oficialmente este lunes en la
conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien además
hizo una despedida oficial de Esteban Moctezuma de la cartera de Educación. El
exsecretario ha sido nombrado embajador de México ante Estados Unidos, un
trámite que el Senado aún debe de formalizar. A Moctezuma le tocó lidiar con
las medidas de contingencia tomadas por las autoridades sanitarias para hacer
frente a la pandemia. Entre ellas el cierre total de las escuelas y el lanzamiento de un controvertido sistema de educación a
distancia y por televisión que ha sido cuestionado
por maestros y expertos en educación, al considerarlo limitado y porque
temen que profundice el atraso educativo que ya afecta a las zonas más pobres
del país.
Moctezuma ha elogiado la decisión, que ha catalogado como
“un avance sin precedentes”. El ahora exsecretario ha dicho que la pandemia
forzó al Gobierno “a dar un salto histórico hacia adelante en materia digital”,
lo que llevó a que se capacitaran más de un millón de maestros y 20 millones de
estudiantes en el uso de herramientas digitales. También ha asegurado que el
Gobierno mantiene el compromiso de llevar internet a todas las escuelas del
país, aunque no ha dado detalles del avance en materia de digitalización en los
centros educativos. Un informe del Consejo Nacional de Evaluación de la
Política de Desarrollo Social (Conavel) publicado en 2018 muestra que la red
solo llega al 22,7% de las escuelas mexicanas.
Garantizar el regreso seguro a los colegios no es un problema menor. Un
estudio publicado en 2019 por el Coneval, el consejo que evalúa las
políticas de combate a la pobreza, muestra que el 81% de las escuelas cuentan
con condiciones mínimas de sanidad y la matrícula de 25 estudiantes por docente
sobrepasa la cantidad de alumnos recomendada por la OCDE. Además, el organismo
autónomo afirma que de las más de 226.000 escuelas públicas del país, el 2,2%
no dispone de suministro de agua de ninguna fuente (red pública, pozos,
abastecimiento por camiones cisternas) y solo 53% cuenta con el abastecimiento
mediante la red pública. Solo el 66,4% de las escuelas tiene servicios
sanitarios y el 66,1% energía eléctrica.
La secretaria Delfina Gómez ha afirmado que trabajará para
mejorar la infraestructura de los centros escolares. “Esto requerirá garantizar
las condiciones de limpieza, salubridad, infraestructura y recursos en los
planteles, así como la difusión y aplicación de protocolos de seguridad
sanitaria, pero sobre todo de la participación de la comunidad que integra
precisamente las instituciones educativas”, ha prometido la funcionaria, quien
además ha explicado que trabajará con las autoridades sanitarias y los
gobiernos estatales para organizar el regreso gradual a los planteles
educativos en aquellas zonas donde lo permita el semáforo epidemiológico. “Se
hace necesario ofrecer a los alumnos espacios dignos, haciendo llegar los
recursos económicos de manera directa a las instituciones educativas”, ha
afirmado Gómez.
La funcionaria también ha dicho que ordenará un “diagnóstico
continuo” para determinar el rezago educativo y el abandono escolar causado por
la pandemia. A inicios de agosto la Secretaría de Educación Pública (SEP) afirmó
que al menos 2,5 millones de estudiantes dejaron las aulas de
clases el año pasado, después de que se suspendiera el ciclo escolar a
causa de la contingencia sanitaria generada por la pandemia. Tras el inicio de
las clases virtuales, las autoridades aún no han informado del nivel de
deserción, pero Gómez ha prometido que desarrollará “estrategias de atención a
la población vulnerable”, en Estados que cuentan con un fuerte rezago. Es el
caso de Chiapas, donde el 45% de los estudiantes de los municipios más pobres han
dejado el curso al no tener las condiciones para adaptarse a la educación
virtual.
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