La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos
vigente el día de hoy fue promulgada el 5 de febrero de 1917; fue producto del
eventual triunfo del ala carrancista sobre los convencionistas liderados por
Francisco Villa durante el desarrollo de la Revolución. En septiembre de 1916,
Venustiano Carranza en calidad de Primer Jefe del Ejército Constitucionalista y
Encargado del Poder Ejecutivo de la República, modificó los artículos 4°, 5° y
6° del Plan de Guadalupe de 1914 para dar paso a la conformación de un
Congreso Constituyente.
El Congreso Constituyente se instaló el 1 de diciembre de
1916 en el Teatro Iturbide en la ciudad de Querétaro, después de un proceso
electoral nacional, concretamente para revisar el proyecto constitucional que
Venustiano Carranza envío para su deliberación.
Es importante mencionar que, en el proyecto del Encargado
del Poder Ejecutivo no figuraba la pretensión de redactar una nueva Carta
Magna, sino solo reformar el texto que hasta ese momento estaba vigente: la
Constitución de 1857.
En el texto redactado por el promotor del Plan de Guadalupe
se reconoce que: “… a pesar de la bondad indiscutible de los principios en
que descansa (la Constitución de 1857) y del alto ideal que aspira a realizar
el Gobierno de la Nación, continuará siendo inadecuada para la satisfacción de
las necesidades públicas, y muy propicia para volver a entronizar otra tiranía
igual o parecida a las que con demasiada frecuencia ha tenido el país…”.
El proyecto de reformas enviado por Carranza al Congreso de
1917 no consideró la inclusión de derechos sociales en el texto constitucional,
por lo que el Congreso Constituyente decidió ir más allá e incluyó en el
proyecto final lo concerniente a la promoción de la educación pública gratuita
y laica, a la regularización de la tierra por parte del Estado y los tipos de
propiedad y a la regulación de los derechos laborales como derechos
inalienables protegidos jurídicamente por el Estado mexicano.
La redacción de los artículos 3°, 27° y 123°, le dieron al
texto constitucional de 1917 su carácter social y pro garantista y fue de gran
influencia, junto a la Constitución alemana de Weimar, en diversos países para
la posterior aparición del Estado social, sobre todo en los países de
occidente.
No obstante, la Carta Magna vigente ha sufrido diversas
adecuaciones a lo largo del tiempo, producto de la necesidad de adecuar su
contenido a los radicales cambios que ha experimentado la sociedad mexicana a
poco más de un siglo de su aprobación.
Hasta el momento, se contabilizan 240 decretos de reformas
al texto constitucional. Esta y mucha más información relevante sobre nuestra
Carta Magna se puede localizar en la página principal de la H. Cámara de
Diputados del Congreso de la
No hay comentarios :
Publicar un comentario