CIUDAD DE MÉXICO.
Por primera vez en la historia legislativa mexicana, las mujeres irrumpieron con fuerza en el Senado, mundo dominado por los hombres, al grado que ellas propusieron e impulsaron el 55% de los decretos de reformas constitucionales, legales y creación de leyes, que nacieron en el Senado y que ahora son una realidad en todo el país.
Con base en el registro oficial del trabajo de los legisladores federales, desde el 1 de septiembre de 2018 al 26 de diciembre de 2019, el Congreso de la Unión generó 58 decretos publicados en el Diario Oficial de la Federación, referentes exclusivamente a cambios constitucionales y legales; de ellos, 29 se originaron en el Senado y, de éstos, 16 fueron propuestos por senadoras.
Publicitada como la Legislatura de la Paridad de Género, la LXIV Legislatura del Congreso de la Unión se caracteriza por la presencia de mujeres casi a la par de los hombres que, desde la creación del primer Poder Legislativo del país, en el siglo XIX, dominaron el mundo de la creación del marco jurídico nacional.
De hecho, es la primera vez en 162 años que dos mujeres presiden ambas Cámaras del Congreso de la Unión. La morenista Mónica Fernández Balboa, en el Senado, y la panista Laura Rojas Hernández, en la Cámara de Diputados.
Por lo tanto, por primera vez la Comisión Permanente del Congreso de la Unión será presidida exclusivamente por ellas; Laura Rojas desde el pasado 15 de diciembre y hasta el 31 de enero de 2020, y Mónica Fernández desde el 1 de mayo hasta el 31 de julio del próximo año.
Para el caso del Senado, de las 128 personas que integran el pleno, 65 son hombres y 63 son mujeres. Pero además, por primera vez las mujeres presiden 21 de las 46 comisiones ordinarias de trabajo, por lo que ahora también ellas tienen control en la construcción de acuerdos.
De igual manera, de las 12 personas que integran la Mesa Directiva, sólo tres son hombres: Salomón Jara y Jorge Carlos Ramírez Marín, vicepresidentes y Primo Dothé, secretario, frente a nueve mujeres, encabezadas por Mónica Fernández Balboa, presidenta, y Guadalupe Murguía, vicepresidenta; el resto ocupa las secretarías.
Por primera vez también, la Junta de Coordinación Política, que hasta el 2018 tuvo una presencia máxima de dos mujeres, ahora tiene a cuatro de 11 integrantes; todavía la mayoría la tienen los hombres, porque se trata de un espacio que ocupan los coordinadores parlamentarios, principalmente y esos son mayoritariamente hombres.
Los resultados de los primeros 15 meses de trabajo de las senadoras de la República demuestra que su presencia numérica no se ha limitado a una presencia cuantitativa, sino también cualitativa, pues hasta el momento 16 de ellas lograron que sus iniciativas se convirtieran en realidad para cambiar el marco jurídico nacional.
En primer lugar están las morenistas Bertha Alicia Caraveo, Citlalli Hernández, Guadalupe Covarrubias, Susana Harp y Lucía Meza; las panistas Guadalupe Murguía, Minerva Hernández, Kenia López y Josefina Vázquez Mota; las priistas Sylvana Beltrones, Claudia Anaya, Vanessa Rubio y Verónica Martínez, la verdeecologista Alejandra Lagunes, la petista Nancy de la Sierra y Sasil de León, de Encuentro Social.
Y aunque no aparece en la lista de las mujeres que convirtieron propuestas en decretos legales, la morenista Ana Lilia Rivera, presidenta de la Comisión de Estudios Legislativos Segunda, tiene récord en procesamiento de dictámenes, pues ha sido codictaminadora del 80% de todos los dictámenes que llegaron al pleno del Senado.
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