La construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México en la base aérea militar de Santa Lucía podría generar daños ambientales de difícil reparación en las áreas naturales protegidas en Zumpango y Tecámac, Estado de México.
Así lo consideró el Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Estado de México al suspender las obras del nuevo aeropuerto hasta que el Gobierno federal presente todos los estudios de impacto ambiental.
El tribunal dijo que la suspensión de la obra no es “arbitraria o caprichosa”, sino un mecanismo para evitar daños al ambiente.
La decisión es temporal ya que el jueves próximo Saúl Martínez Lira, juez cuarto de distrito en Materia Administrativa, resolverá si concede o no la suspensión definitiva en este juicio, promovido por Juan Morera Mitre. Si se concede, se mantendría hasta que concluya el juicio de amparo, lo cual podría tardar varios meses y por ende retrasar el inicio de la construcción del aeropuerto.
El presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a respetar la decisión del Tribunal. “No hay obras todavía (en Santa Lucía), pero de todas maneras vamos a respetar la decisión”, aseguró.
Dijo que aún se está a la espera de que se emita el dictamen sobre impacto ambiental y aprovechó para defender la obra. “Santa Lucía les molesta mucho a los corruptos”, indicó.
Acusó que, incluso, se han volado drones para grabar la base aérea de Santa Lucía y “tener pruebas” de que se está trabajando y poder detener la supuesta obra. “Están muy desesperados”, insistió.
La suspensión provisional de la obra fue aprobada por mayoría de dos votos, de las magistradas Adela Domínguez (ponente) y Julia María del Carmen García, y voto en contra del magistrado Jacob Troncoso.
En su sentencia, el tribunal dijo que lo obra afectaría no sólo al Parque para la Protección y Fomento del Santuario del Agua Laguna de Zumpango y al Parque Ecológico Sierra Hermosa, en Tecámac, considerados áreas naturales protegidas, sino también zonas adyacentes.
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