El Estado de México vive la primera elección realmente competida en su historia, donde a menos de un mes de la jornada electoral no se sabe quién va a ganar, pues algunos de los candidatos van muy parejos, lo que hace necesario que en el tiempo que resta de campaña y durante el debate de este día, logren que sus propuestas lleguen al electorado para evitar el abstencionismo o el llamado voto blanco.
Cecilia Cadena, investigadora en el Colegio Mexiquense A.C., recordó que la elección del Estado de México es importante para el país, pues está vinculada al proceso electoral federal del próximo año, motivo por el que los candidatos hacen su mayor esfuerzo para atraer el voto de los ciudadanos.
Consideró que los candidatos están muy parejos, PAN, PRI y Morena, el PRD empieza a despuntar, “pero no sé si alcance a remontar”.
Expresó que como sociedad se está preparada para vivir este proceso electoral, sin embargo, hay mucha corrupción, no en el proceso electoral, sino en el uso de los recursos para obtener el voto
Señaló que el PRI, por temor a dejar de gobernar casi 90 años en el Estado de México, aplica muchos recursos para obtener el voto y mantenerse en el poder, con el agravante de que no sólo son recursos estatales, sino federales.
Se viene trabajando para garantizar estas ayudas de asistencia social que garanticen el voto, aprovechando la condición de pobreza que predomina entre la población.
Al hacer una comparación con el proceso electoral de Francia, guardando las grandes diferencias, dijo, en esa nación también hubo cierto desencanto democrático, sin embargo, a diferencia de México no se gasta tanto dinero en un aparato burocrático para realizar las elecciones.
La investigadora sostuvo que en varios países del mundo hay un desencanto electoral, el cual tiene que ver con que la sociedad ha cambiado, se tiene los mismos partidos y candidatos de siempre, aunado a esta etapa híper moderna que en México combina con el tradicionalismo o premodernismo.
En Francia de la forma tradicional de hacer política, surgió un candidato como Emmanuel Macron, que dijo yo soy antisistema, lo cual también se vio en Estados Unidos con Donal Trump, eso es lo que a la gente le gustó, pero lo que no sabe es que ser antisistema es salirse de un funcionamiento institucional que permite dar orden a las relaciones políticas.
Sostuvo que Andrés Manuel López Obrador, líder nacional de Morena se puede llamar antisistema, pero su antisistema va al punto muy hipermoderno, al decir las instituciones me van a servir si cumplen con los propósitos con lo que quiero, si no al diablo con ellas, lo cual es peligroso. Se trata de un hombre que puede tener buenas ideas, pero debe haber respeto a las instituciones, pues son un contrapeso para el abuso del poder.
Finalmente, sostuvo que la diferencia con Francia, es que en esa nación gobierna quien tiene la mayoría absoluta, mientras en México hay quien asume el poder con el 30 por ciento de la votación. Se trata de una nación donde el voto blanco tiene sentido, obliga a repetir una elección, lo cual no sucede en México, donde no hay una segunda vuelta.
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