TECÁMAC, Méx., 4 de octubre.- El taxista Carlos Trejo fue ejecutado de un balazo en la cabeza y su cadáver abandonado en el camino a la Hacienda Rancho Azul de este municipio. Por la forma en que fue ultimado, los encargados de las investigaciones presumen que se debe a una venganza.
Como parte de las pesquisas, agentes de la Policía Ministerial de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México interrogan a familiares de este trabajador del volante, a fin de conocer los motivos por los que fue asesinado.
El cadáver del taxista, identificado como Carlos Trejo, de 60 años de edad, fue encontrado por vecinos en el kilómetro 39 de la autopista México-Pachuca, en el Camino a la Hacienda Rancho Azul de este municipio.
Los primeros informes policiales indican que la víctima se encontraba entre campos de cultivo, a unos 200 metros de la autopista. En el sitio se localizó un casquillo percutido cuyo calibre no fue revelado.
La zona fue acordonada por la Policía Municipal y agentes de la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana.
A la escena del crimen acudieron socorristas de la Cruz Roja, los cuales revisaron el cuerpo y descubrieron que ya tenía varias horas de haber dejado de existir.
Una vez que los investigadores recogieron toda evidencia que los lleve al esclarecimiento de este crimen, el cadáver fue trasladado al anfiteatro de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, donde se continúa con las investigaciones, en un intento por obtener información que los lleve al esclarecimiento de este asesinato.
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