Por Víctor Piz
Al modificar el calendario de los anuncios de sus decisiones de política monetaria para el segundo semestre del año, el Banco de México (Banxico) evitará la discusión entre los cinco miembros de su Junta de Gobierno respecto a la opción de adelantarse a la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
Anticiparse o no a la Fed había sido motivo de discusión en los últimos meses entre Agustín Carstens, Roberto del Cueto, Javier Guzmán, Manuel Ramos y Manuel Sánchez, según las minutas de las reuniones de la Junta de Gobierno del Banco Central.
El próximo anuncio, originalmente programado para el 23 de julio, pasa al 30 de ese mes, sólo un día después de la reunión de la Fed.
Y el siguiente anuncio, cuya fecha original era el 3 de septiembre, pasa al 21 de ese mes, dos días hábiles posteriores a la reunión de la Fed, considerada clave pues es cuando se dará el primer incremento en la tasa de referencia en Estados Unidos (EU), según el consenso de analistas.
Con el nuevo calendario, el Banxico no va a adelantarse a la decisión de la Fed, sino que actuará una vez que aumente la tasa de Fondos Federales en EU.
Actuará de manera reactiva más que preventiva, con lo que condicionará el ‘apretamiento’ de la postura monetaria en México a lo que haga la Fed.
Si bien tiene riesgos condicionar el ajuste en México al de EU, la ventaja de una reacción temprana del Banco Central es que podrá hacer frente a la volatilidad en los mercados con mayor rapidez.
No obstante, el Banxico actuará oportunamente, incluso anticipándose a la Fed, si la Junta de Gobierno advierte riesgos para la inflación y/o la estabilidad financiera del país.
Los riesgos podrían provenir de la situación de crisis en Grecia o del pinchazo de la burbuja bursátil en China.
En los próximos días el principal factor de incertidumbre en los mercados seguirá siendo la permanencia o salida del país heleno de la Zona Euro, aunque no debe minimizarse el desplome de la bolsa china.
Los riesgos vinculados con los problemas de Grecia o China podrían hacer necesario ‘apretar’ la política monetaria en México antes que en EU.
En contraposición a los factores externos, que en este momento son la principal fuente de incertidumbre, los internos hacen innecesario iniciar un ciclo de restricción monetaria.
En México, el crecimiento económico débil y el comportamiento favorable de la inflación y sus expectativas sugieren mantener sin cambios la postura monetaria.
Pero como dijo Carstens hace unos días, el Banxico “deberá actuar oportunamente ante cualquier evento que llegase a desanclar las expectativas de inflación… Y esto, aun con independencia de las acciones de política monetaria que tome la Fed”.
Los efectos de la crisis griega o del pinchazo de la burbuja china pueden repercutir en los mercados financieros de México, en particular en el cambiario, así como deteriorar la inflación y sus expectativas.
Y en caso de que éstas se desvíen, no hay duda de que el Banxico ‘apretará’ su postura monetaria.
Twitter: @VictorPiz
Directorio
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario