El acuerdo publicado en el DOF el 22 de noviembre tuvo su origen en la respuesta que dio la Sedena para contestar un centenar de amparos.
El acuerdo publicado el pasado 22 de noviembre en el Diario
Oficial de la Federación (DOF) mediante el cual se ‘blinda’ a las obras de la
4T al considerarlas como asuntos de “seguridad nacional” tiene su razón en
dos ‘mentes maestras’.
¿De quiénes fue la idea y por qué? Las razones se reducen a
la prisa del presidente López Obrador por acabar a tiempo sus proyectos
insignia: el Tren Maya, la refinería Dos Bocas, el Corredor
Transístmico y el aeropuerto de Santa Lucía.
“El presidente está muy molesto. Al paso actual y faltando
menos de tres años, tal vez el aeropuerto sea lo único que inaugure
parcialmente, y eso está por verse”, subrayó este lunes Darío Celis en su
columna La historia detrás del ‘decretazo’.
Ensimismado en inaugurar sus proyectos contra todo
pronóstico y a como de lugar, López Obrador encontró en el secretario de la
Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, a una especie de
‘salvador’. Él fue la clave, de él vino la idea de ‘blindar’ los proyectos para
que ninguna circunstancia jurídica frenara los avances.
“El acuerdo del 22 de noviembre tuvo su origen en la
respuesta que dio la Sedena en septiembre de 2019, para contestar el
centenar de amparos que buscaban cancelar las obras del nuevo
aeropuerto.El jurídico de la Defensa Nacional argumentó que al ser el Felipe
Ángeles una instalación militar, era un proyecto de seguridad nacional. El juez
en materia administrativa les dio la razón y no frenó la obra”,
escribe Celis.
Pero como en todo ‘plan maestro’, se necesitan dos figuras:
quien pone la idea y quien la aplica. Y la pieza faltante para la estrategia
perfecta la puso Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda, “quien
retomó el argumento de seguridad nacional para aplicarlo a toda la
infraestructura de la 4T”.
Y ya unidas las piezas, el presidente López Obrador se ha
sentido con toda la confianza de asegurar que el único objetivo es “agilizar
trámites burocráticos y que esto no tiene nada que ver con la transparencia”, según
afirmó el mandatario en su conferencia matutina del pasado 23 de noviembre.
Sin embargo, catalogar a una obra en esta categoría va más
allá de representar una ‘buena intención’ por parte del Gobierno, pues al ser
la “seguridad nacional” una de las causas de la reserva de información,
prevista en el artículo 110, fracción I, de la Ley Federal de Transparencia y
Acceso a la Información Pública, el
INAI advirtió que las distintas dependencias de la Administración
Pública Federal pueden llegar a reservar la información relacionada con
estas obras
Es decir, que cualquier solicitud de información que
se haga para conocer el estado de alguno de los proyectos en marcha podría
ser negada.
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