Hijos, parejas, papás, sobrinos, tíos, cuñados y hasta
suegras de al menos 500 jueces y magistrados del Poder Judicial ocupan plazas
en tribunales y juzgados de su adscripción o de otros, revela un estudio
realizado en 31 estados y que fue entregado al Consejo de la Judicatura Federal
(CJF) y a la Suprema Corte de Justicia de la naci{on (SCJN).
Dicho estudio, elaborado por el consejero de la Judicatura,
Felipe Borrego Estrada, llegó a manos también de Mexicanos Contra la Corrupción
y la Impunidad (MCCI) y revela además que las “redes clientelares” de los
jueces y magistrados se extienden a siete mil 148 servidores públicos de 31
circuitos que también tienen familiares en la nómina.
De acuerdo con el diagnóstico, casi la mitad de los jueces y
magistrados federales tienen parientes en el Poder Judicial: de mil 31 plazas
revisadas en 31 circuitos, 501 tienen familiares, lo que representa el 48.6%.
Según el reporte, 112 jueces y magistrados habrían utilizado sus facultades
para conseguir empleo a su esposa o pareja, 180 a sus hijos, 136 a sus hermanos
y 27 a sus papás, y aunque identifica a cada juzgador y empleado por su número
de expediente, el estudio no proporciona sus nombres.
El artículo 97 de la constitución faculta a jueces y magistrados
para nombrar y remover a los funcionarios y empleados de los Tribunales de
Circuito y de los Juzgados de Distrito. Dicha disposición legal fue concebida
para garantizar la autonomía de los jueces, pero sólo ha servido para el
nombramiento discrecional de parientes. Y peor aún, no sólo los magistrados de
circuito y jueces de distrito logran generar redes clientelares haciendo mal
uso de esta atribución.
El estudio muestra que secretarios, actuarios, oficiales y
administrativos tienen familiares en el mismo circuito y en otros, e influyen
en la designación sin que sea posible incoarles (iniciarles proceso o
expediente) ningún tipo de responsabilidad. Incluso, los juzgadores
intercambian empleos para sus familiares con colegas de otros circuitos, quienes
corresponden de igual manera. Uno de los casos más notables es el de un
magistrado del circuito de Durango que integró a 17 miembros de su familia,
entre hijos, hermanos, concuños, cuñadas, primos y sobrinos en puestos
administrativos, con cargos de actuarios, secretarios de tribunal y juzgado,
asesor jurídico y analista especializado.
Otros dos magistrados de San Luis Potosí y de Baja
California tienen 11 parientes cada uno, señala el estudio, cuyos datos fueron
recopilados por el consejero Felipe Borrego Estrada en visitas realizadas del
28 de enero de 2016 al 31 de enero de 2017 en 31 circuitos del país, y la
información recabada fue corroborada con información del CJF. Hay estados donde
el nepotismo es más grave.
Es el caso del circuito décimo sexto, correspondiente a
Guanajuato, donde 38 de 46 titulares tienen familiares, es decir, el 82.61%. El
único circuito no incluido en el estudio es el primero, correspondiente a la
Ciudad de México, debido a que “los responsables del estudio no pudieron
obtener información”.
Tampoco consiguieron datos en los órganos jurisdiccionales
de Nezahualcóyotl y Naucalpan. En el circuito correspondiente a Aguascalientes,
el 81% de los jueces y magistrados tienen parientes trabajando con ellos.
De 16 titulares de tribunales y juzgados, 13 cuentan con
familiares.
El circuito correspondiente a Jalisco ocupa el tercer lugar
con más juzgadores que tienen parientes en el Poder Judicial, con 76%. Pese a
ser el estado más pequeño, Tlaxcala registra uno de los más altos porcentajes de
nepotismo judicial, del 70% en el caso de juzgadores y de 45% entre los
funcionarios del vigésimo octavo circuito. Mientras que el tercer circuito, que
corresponde a Jalisco, ocupa el primer lugar nacional en contratar a los hijos
de jueces y magistrados: 33 juzgadores tienen en el mismo Poder Judicial
Federal a 54 de sus hijos.
Los jueces también suelen integrar a sus parejas en la
nómina: entre los 31 circuitos analizados, se identificó a 112 juzgadores que
tienen a su cónyuge, pareja o exesposa trabajando en el Poder Judicial.
Destacan el circuito sexto de Puebla, en donde se ha dado trabajo a 11 parejas
de jueces y magistrados, el décimo sexto de Guanajuato con 10 casos y el décimo
octavo de Morelos con nueve. Por último, el estudio revela que 136 juzgadores
tienen hermanos que trabajan en los juzgados y tribunales.
En este caso Michoacán está en primer lugar, con 20 de estos
casos, seguido de Jalisco con 17, y en el caso de emplear a los padres, esta
práctica se dio en once circuitos, donde trabajan los padres de 27 magistrados.
Destaca el caso de Puebla, donde se empleó a papás o mamás de 13 juzgadores.
No hay comentarios :
Publicar un comentario