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viernes, 21 de agosto de 2020

El expresidente Felipe Calderón también se deslindó y rechazó las acusaciones de corrupción en Odebrecht en su contra.







El escándalo de corrupción entre panistas, priistas y perredistas que destapó la denuncia de Emilio Lozoya, y que balconeó a diversos políticos, continuó y aceleró una apresurada cascada de deslindes, principalmente vía redes sociales.

Asimismo, el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó de “grave”, “escandalosa” y “efectiva” la denuncia del exdirector de Pemex contra expresidentes, exsecretarios, excandidatos a la Presidencia y exlegisladores

Luego de la filtración del texto de la demanda completa, de 63 páginas, que el acusado y procesado por corrupción Emilio Lozoya presentó ante la Fiscalía General de la República (FGR), el primero en responder con una demanda penal fue el panista Ricardo Anaya, quien, a través de un despacho de abogados, demandó el jueves a Lozoya “por daño moral”, debido a que es acusado de recibir 6 millones 800 mil pesos del exdirector de Pemex, por instrucciones del exsecretario de Hacienda, Luis Videgaray.

“Como lo anticipé, hoy inicié acciones legales ante el Poder Judicial Federal, a fin de demandar por daño moral a Emilio Lozoya. Ahora soy yo quien está llevando el caso ante un juez, para que se investiguen los hechos y se valoren las pruebas. La verdad está de mi lado”, escribió en su cuenta de Twitter.

Anaya afirma que su denuncia fue presentada ante el Poder Judicial Federal, aunque este delito es de competencia local.

Sólo en redes y con declaraciones, el expresidente Felipe Calderón también se deslindó y rechazó las acusaciones de corrupción en Odebrecht en su contra, y acusó que “el manejo ilegal y mediático del caso confirma que Lozoya (con el chantaje de tener presa a su mamá) es utilizado por López Obrador como un instrumento de venganza y persecución política. No le interesa la justicia, sino el linchamiento, haciendo en mi caso acusaciones ridículas”.

Sostuvo que defenderá su “honorabilidad” ante las instancias jurídicas –no indicó cuándo ni cómo– y se declaró un “perseguido político” del presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, en entrevista con Radio Fórmula, aseguró que “aquí estoy, aquí vivo y estoy a las órdenes de todo en un juicio apegado a derecho, estoy tranquilo”.

Señalado por Lozoya como figura central de repartos de los sobornos al PAN, el extitular de Hacienda y canciller de Peña Nieto, Luis Videgaray, también negó los hechos.

“Las acusaciones de Lozoya son mentiras inventadas para intentar librar las consecuencias de sus propios actos. El único responsable de la situación legal que enfrentan él, su madre, su hermana y su esposa, se llama Emilio Lozoya”, tuiteó.

“Tampoco me sorprende que intente culparme precisamente a mí de sus actos indebidos: desde aquellos años es ampliamente sabido que tuvimos una mala relación personal, resultado de su mal manejo financiero de Pemex, de lo que pretendía hacer con la reforma energética y de su conducta como servidor público”, añadió.

Ernesto Cordero, exsecretario de Hacienda de Felipe Calderón y otro de los principales vínculos como senador del PAN con Peña Nieto, Videgaray y Emilio Gamboa en el Senado, también rechazó por redes el señalamiento de Lozoya. “Nunca, como servidor público, participé en un acto de corrupción. Los supuestos señalamientos de Emilio Lozoya son falsos”, expresó en Twitter.

Carlos Treviño, exdirector de Pemex, también rechazó las acusaciones por el caso Etileno XXI. “Niego rotundamente las acusaciones hechas hacia mi persona en el documento que circula en las redes, al ser totalmente falsas”, tuiteó.

En un desplegado público, el exsenador hidalguense del PRI, David Penchyna, también señalado por sobornos en el Senado, dijo desconfiar de la “filtración” de versiones y de la denuncia de Lozoya, negó “cualquier acto ilegal” de su parte, “no soborné ni fui sobornado” y que estará “a disposición de la autoridad”.

AMLO valida la denuncia y pide hacer del caso... una historieta

El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó la veracidad de la bomba lanzada contra la clase política mexicana. Ayer, el titular del Ejecutivo calificó como “grave”, “apasionante” y “efectiva”, la denuncia del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, en contra de tres expresidentes, cuatro exsecretarios de Estado, ocho exsenadores, un presidente de la Cámara de Diputados, un presidente del Senado, un exgobernador, tres gobernadores actuales, cinco exfuncionarios y cuatro empresarios.

“Todo indica que es cierta, efectiva, que no es apócrifa, que es la denuncia que en efecto presentó a la Fiscalía, o sea, que el documento es auténtico”, aseveró el mandatario federal en su conferencia matutina desde Zacatecas, desde donde se desmarcó de la distribución de la filtración el miércoles por la noche.

Aunque consideró que, desde luego, “no significa que todo lo que ahí se dice sea cierto”, pues falta que la Fiscalía General de la República (FGR) recabe todas las pruebas y de ahí que se llame a declarar a los involucrados.

Insistió en que el fiscal Alejandro Gertz Manero “actúe con profesionalismo, con rectitud y desde luego con apego a la ley”.

Reconoció que no había terminado de leer toda la declaración, hecha pública en los medios de comunicación, pues ya se estaba desvelando “y no quería tener pesadillas, por lo que estaba leyendo porque sí está escandalosa”.

No obstante, pidió a los ciudadanos no dejar de leer el documento, que circuló, “porque todos debemos estar informados sobre este tema.

“Que no se manipule, que no haya silencio, que se sepa todo, que se conozca la verdad”, llamó.

En la conferencia, López Obrador también fue consultado si se podría entregar masivamente, como se hace con la denominada cartilla moral, a fin de que se conozca y se cumpla “su deseo”, a lo que el Presidente sugirió elaborar un cómic.

“Es muy bueno tu planteamiento. Yo creo que sí se tiene que hacer una historieta, pero hasta que se resuelva el asunto. Esto es apasionante, ahora sí ¿dónde están los escritores, los intelectuales?”, manifestó.

Finalmente, sugirió a los involucrados despreocuparse, en caso de no tener implicación.

“Nosotros no estamos persiguiendo a nadie, lo que queremos es que se acabe la corrupción, que se acabe el bandidaje oficial, que ya no haya Lozoyas y Garcías Luna”, aseveró.

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