*Todos a pagar los ajustes económicos
Empiezan los momentos de tensión en el Estado de México. Los jalones para estirar y aflojar en materia de presupuesto estatal, apenas empiezan.
Las siguientes semanas, al menos hasta antes del 20 de diciembre, no serán aptas para cardíacos, sobre todo porque los nuevos integrantes del Congreso estatal están más que puestos y con tijeras en mano para confeccionar, a base de recortes, un nuevo presupuesto para el gobierno mexiquense.
De momento, todas y cada una de las oficinas públicas, tienen una actividad sin igual, pues llevan a cabo evaluaciones de los distintos programas, obras y proyectos a realizar con dinero público, para determinar cuánto y en qué forma gastarán para el 2019.
Acorde con lo establecido, el documento relativo a la descripción de recursos para el próximo año será escrupuloso, detallando y posiblemente dejará a muchos con la sonrisa de lado o gestos compungidos al no tener suficiente dinero para funcionar bien.
Aunque los esfuerzos para sumar y restar en las diferentes dependencias del estado se llevan a marchas forzadas, es cuestión de días para que cada una lo tenga concluido y se remita a la Secretaría de Finanzas que será el ente encargado de recopilar las peticiones, deseos y proyecciones.
Desde la Legislatura adelantan que analizarán a detalle la descripción de ingresos y egresos, pero en caso de dudas, no tendrán empacho en aclararlas. El asunto aquí es que el presupuesto debe estar aprobado antes de que finalice la última semana de diciembre.
Si no se llegan a acuerdos, podría venirse abajo todo y entrar en una paralización.
SIMPLEZAS
Analistas de todos los niveles y tamaños explican que no existe más que evidencia de que antes de que entre en funcionamiento el nuevo gobierno, la división entre el Legislativo y el Ejecutivo es evidente, lo cual ahondará la división, confrontación y mentadas entre uno y otro.
Prueba de lo anterior es que luego de la iniciativa del grupo Morena en el Senado para eliminar las comisiones bancarias, la rebelión se hizo manifiesta y hoy por hoy, 58 integrantes de esa fracción respaldan la iniciativa a pesar de que AMLO no quiere saber nada de ella. ¿A quién le creemos?
Lo cierto es que después de la estrepitosa caída de la Bolsa Mexicana de Valores, los representantes del sector empresarial han logrado coincidir en que quien pagará los costos de esos desaciertos serán quienes deben créditos en México, o sea, todos…. ¡
Muchos empresarios empiezan a conocer a Toluca como “Tolutianguis” debido a la indiferencia de la autoridad municipal para detener el crecimiento de este problema que encabezan grupos procedentes de la Ciudad de México con grandes simpatías con varios grupos delincuenciales.
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