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lunes, 10 de octubre de 2016

El box también es cosa de niñas.



Recientemente me encontraba en la búsqueda de nuevas disciplinas que me ayudaran a complementar mi entrenamiento cardiovascular con algo de fuerza y fue ahí cuando conoci por primera vez el box. Siempre había creido que era un deporte exclusivo para hombres o bien, que las mujeres que participaban en esta disciplina eran "rudas" y "masculinas" ¡Ohhh gran error en el que vivía! En mi primer entrenamiento personalizado me enamoré de su entrenamiento, de su vibra, de la fuerza pero sobre todo, del autocontrol.También descubrí que hay cientos de mujeres entrenando hoy en día y que no necesariamente combaten (lo que en el mundo del box se llama "sparring") sino que únicamente entrenan sin tener contacto y gozan de los beneficios y resultados, de entre los que destacan:
• Pérdida de peso.
• Reducción de talla.
• Aumento de condición física de forma muy considerable.
• Tonificación de espalda y antebrazo.
• Disminuación de grasa localizada en la cintura.
• Aumento de reflejos para mejorar tu reacción.
Fue entonces cuando sentí el amor a primera vista; el olor de los guantes de piel, el estrés que sacaba mientras golpeaba el costal, el poder en mis manos y lo mejor de todo, la capacidad como mujer, de sentirme fuerte y victoriosa.
Así que empece a aplicarme y a investigar más sobre el box, después de todo no era un juego de niños ni quería salir lesionada y le pregunte a mi coach cuáles eran las recomendaciones básicas que debía seguir para entrenar correctamente; aquí les menciono algunas:
1. Si estás iniciandote en el mundo del boxeo, jamás lo hagas solo/a. Los expertos recomiendan tomar clases con un entrenador personalizado, que pueda supervisar de cerca los movimientos de tus codos, rodillas, hombros y espalda baja, un golpe mal dado puede poner fin a tu recién iniciada aventura.
2. Entrena con los expertos, desafortunadamente como en todo, hoy en día existe mucha charlatanería, asegurate que tu gym o entrenador este certificado por el Comité Olimpico Nacional o bien por alguna asociación internacional, recuerda que dar clases de Zumba o Spinning, no es lo mismo que dar clases de Box.
3. Hace mucho tiempo que el Box dejó de ser una disciplina sucia y sudorosa, asegúrate de tener las medidas de higiene necesarias con tus vendas y guantes, de preferencia compra tu propio equipo para no tener que usar el de nadie más.
4. ¿Te gustó tanto que ahora quieres competir? debes asegurar que tu contrincante tenga el mismo nivel de experiencia y hasta el mismo peso, uno o dos kilos pueden ser la diferencia mortal en este tipo de combates.

Ahora por último, ¿sigues teniendo dudas? a continuación desmentimos los principales mitos al rededor del box.
Mitos y realidades de las mujeres que entrenan Box
MITO 1. Me voy a volver agresiva y peleonera. ¡Falso! El box, aunque parezca lo contrario, es una disciplina que promueve la paz y la estabilidad. Al manejar el estrés golpeando costales o peras liberas tensiones y aprendes a lidiar con el enojo.
MITO 2. Al aprender a boxear me puedo defender del mundo entero. ¡Falso! Aunque esta catalogado como arte marcial, esto no te convertirá en "superchica"; el box enseña a tener la capacidad de huir y alejarte en una situación que ponga en riesgo tu vida.
MITO 3. Seguro terminaré lesionada. ¡Falso! Sabemos que cualquier disciplina que se practique sin las medidas necesarias de seguridad puede provocar lesiones. ¡Hasta el yoga! así que libera tu mente de esos miedos innecesarios, mientras sigas las instrucciones de un entrenador experto y cuides tu calentamiento, vendaje y uso de guantes, no debes de tener ninguna desventaja que propicie una lesión.
MITO 4. De seguro debo de tener un carácter agresivo y yo soy muy tímida. ¡Falso! El box tiene que ver con llevar al ring una actitud de lucha, lo mismo se traduce en la vida diaria. Una boxeadora es apasionada, busca cumplir sus metas y cumple todo lo que se propone, en el ring y en el terreno personal.

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