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martes, 29 de marzo de 2016

Urgen ambientalistas 'no retrasar' norma sobre control de emisiones para vehículos de carga

Los ambientalistas insistieron en que la principal resistencia se observa entre los industriales de autobuses de carga y de pasajeros "para dar el salto tecnológico e incorporar a sus flotas la tecnología más avanzada", se quejan de la falta de incentivos y ruta de implementación.

Conferencia de prensa de grupos ambientalistas
La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha postergado la publicación de la NOM-044, que mejora el control de emisiones para vehículos de carga y pasajeros que circulan con diésel, denunciaron ambientalistas en conferencia de prensa.
Mientras en México se agravan la contaminación ambiental y los efectos del cambio climático, por el uso de tecnologías menos limpias ambientalistas de México y el mundo resaltan que nuestro país ya cuenta con una norma de avanzada para el control de vehículos pesados, elaborada por expertos, académicos, sociedad civil y autoridades durante 2015 y desde octubre solo espera su publicación que, posiblemente, ha sido retrasada por la propia industria del transporte pesado.
Expertas del Centro Mexicano de Derecho Ambiental, A.C. (CEMDA) advirtieron que el transporte pesado tiene una fuerte responsabilidad en la contingencia ambiental, Gisselle García, su Analista de Política Pública, Gabriela Niño y Margarita Campuzano; junto con Kate Blumberg (Senior Fellow del Consejo Internacional sobre Transporte Limpio ICCT, por sus siglas en inglés); Dan Greembaum, (Presidente del Instituto de Efectos en la Salud, HEI, por sus siglas en inglés) y Amanda Maxwell (Directora de Proyectos en Latinoamérica para el Consejo de Defensa de Recursos Naturales, NRDC por sus siglas en inglés); criticaron la postergación "injustificada" de la regulación de los estándares máximos permitidos de contaminantes para vehículos pesados que usan diésel, lo que agrava el problema de la contaminación ambiental y deteriora la calidad de vida de los habitantes.
Los grupos insistieron en que la principal resistencia se observa entre los industriales de autobuses de carga y de pasajeros "para dar el salto tecnológico e incorporar a sus flotas la tecnología más avanzada", se quejan de la falta de incentivos y ruta de implementación.
Los industriales "han hablado de un plan de incentivos a plazos, pero lo importante es que esos vehículos ya se producen en México, no hay necesidad de realizar una reconversión para generar una nueva flota porque estos vehículos ya se producen para su exportación a Estados Unidos y Europa, pero ellos quieren tratar de sacar su flota obsoleta", explicó Campuzano.
"En el caso de los hombres-vehículo que transitan en viejas flotas se sugiere un programa para integrar las llamadas 'trampas de partículas' a la maquinaria del transporte obsoleto en uso; esto no es caro. Sería muy importante sacar un acierto en este tema en el transporte de carga para que no tengan que adquirir un vehículo con las nuevas tecnologías", agregó la integrante del CEMDA.
Las nuevas tecnologías ambientales ya integradas en la industria y usuarios del transporte pesado en los Estados Unidos y Europa, "han logrado reducir en un 95% las emisiones de los contaminantes primarios de los vehículos, en especial de las partículas suspendidas, PM 2.5, y óxidos de nitrógeno, NOx", explicaron.
A nivel mundial, los vehículos pesados a diesel son responsables del 80% de las emisiones del transporte en carretera lo que implica un impacto significativo en la calidad del aire local, la salud y el clima sobre todo en lo que se refiere a 'carbón negro', (principal componente de las emisiones PM2.5), dijeron.
Los ambientalistas internacionales estiman que el "salto tecnológico" implicaría un costo de 5 mil 466 dólares; pero en un corto periodo, se obtendrían de 12 mil a 26 mil dólares derivado tan solo de ahorro de combustible.
En la Ciudad de México se respira un aire "muy malo" y evidentemente, en paralelo, "urge un combustible limpio nos las más estrictas y regulación de que todo esto se cumpla".
"El aire contaminado en México genera al año 18 000 muertes prematuras por exposición a contaminantes ambientales, en especial las partículas finas (PM 2.5) emitidas por el diésel. Asimismo cerca de dos mil mueren por exposición al ozono", declaró Dan Greembaum, presidente del Instituto de Efectos en la Salud, HEI, por sus siglas en inglés.
Los motores viejos a diésel representan un significativo riesgo para la salud por enfermedades de pulmón y del corazón, asma y otros padecimientos, incluido el cáncer, finalizó Greembaum.

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