Para este 2016 las autoridades mexiquenses pretenden realizar 13 mil registros o cacheos en los 20 reclusorios de la entidad, con el fin de detectar y decomisar objetos y sustancias prohibidas que puedan poner en riesgo la seguridad en esos centros y 278 inspecciones y supervisiones integrales que les permitan conocer el estado de las zonas proclives a poner en riesgo la seguridad en las instituciones de reclusión.
También planean efectuar 4 inspecciones para revisar y brindar mantenimiento al armamento y equipo de radiocomunicación, con el fin de mantenerlo en estado óptimo de operación y 7 mil 665 monitoreos de las acciones de seguridad y desarrollo de actividades en las instituciones de reclusión, vía radio base y telefónica para conocer las incidencias generadas por la población interna.
Asimismo, pretenden ejecutar 21 mil 300 traslados de un penal a otros de internos por audiencia, atención médica y medidas de seguridad, para garantizar la integridad física de todos los reclusos, incrementar las acciones del Programa de Tratamiento Readaptatorio, acercarlos al lugar donde radican sus familiares.
Como parte de las metas previstas para el siguiente año, el gobierno espera controlar y registrar el acceso de 800 mil visitantes para conocer el número de
personas que ingresan a las instituciones de reclusión, a efecto de integrar estadísticas de atención a la ciudadanía con algún familiar privado de su libertad, procesado o sentenciado.
Otra acción será realizar dos evaluaciones del Programa Integral de Seguridad Penitenciaria para conocer si se han cumplido las acciones encaminadas al fortalecimiento de esos espacios.
A través de las propuestas de metas establecidas por el gobierno estatal entregadas a los legisladores locales, el gobierno presume que en los 20 centros preventivos de readaptación social del Estado de México se han implementado mecanismos tecnológicos, a través de unidades de monitoreo y videovigilancia, sistema de inhibidores de señal telefónica móvil, sistema biométrico de control de ingreso, entre otros.
Para la operación de la seguridad penitenciaria, el 80 por ciento de los Centros de Prevención y Readaptación Social, la autoridad asegura que tienen tecnología moderna como inhibidores de telefonía celular, detectores de droga "SNIFFER", sistemas de sensores para revisión aleatoria y videocámaras en interiores
Sin embargo también presenta varias medidas y acciones para fortalecer la seguridad, entre ellas: impartir 35 cursos de formación y actualización al personal de seguridad, a fin de elevar el nivel de desempeño en la labor penitenciaria, entre ellas: llevar a cabo 13 mil registros en los reclusorios.(S)
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