Álvaro Muñoz Infante, vicepresidente de Servicios del Consejo de Cámaras y Agrupaciones Empresariales del Estado de México (Concaem), explicó que es en los municipios donde se ha encontrado el problema para obtener estas licencias, cientos de las cuales están rezagadas, en algunos casos no descartó que sea por cuestiones de corrupción.
Por ello llamó a los ayuntamientos a agilizar la respuesta a las solicitudes y sugirió que el siguiente año, para todos los que ya han cumplido una inspección meticulosa de acuerdo con las nuevas disposiciones, sólo se les pida un refrendo ágil, "pues nos asusta en enero o febrero volver a comenzar toda esta tramitología", subrayó.
Ha sido complicado y el sector ha enfrentado una sobrerregulación, "la cual entendemos en el sentido que se trata de evitar que haya negocios con actividades" pero, insistió, "pagan justos por pecadores".
Esto quiere decir, añadió en entrevista, que han sometido a todo el sector a una regulación muy intensa, cuidadosa y tardada, hay un porcentaje de 40 por ciento que todavía no tiene su licencia aprobada porque se debe pasar por una tramitología extensa, que incluye la aprobación de los municipios y de instancias estatales.
Informó que se ha sesionado todos los viernes de manera continua con la Comisión para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris), para aprobar estas licencias, pero en los municipios es donde más se están tardando, insistió.
Muñoz Infante aclaró que hay municipios muy cumplidos pero, aunque no precisó nombres, también hay demarcaciones en donde se retrasan las aprobaciones con la finalidad de provocar corrupción, para negociar.
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