MAURICIO VALDÉS
El domingo pasado el Partido Morena realizó
su Congreso para elegir a la nueva dirigencia del Estado de México. Habían
participado poco más de 500,000 afiliados para elegir a los 410 delegados (10
por distrito electoral federal), que según se informaba 220 electos pertenecían
al grupo de Mexiquenses de Corazón. Este sólo hecho es relevante en la vida de
los partidos políticos de nuestro Estado.
El resultado final favoreció a la
tenacidad, el esfuerzo, la estrategia, la capacidad de movilización y más, con
217 delegados a favor de los triunfadores y 153 de sus competidores. Uno mi
felicitación a las expresadas a la Presidenta, Senadora Martha Guerrero, de los
Reyes la Paz; al Secretario General, Dip. Nazario Gutiérrez, mi Paisano de
Texcoco; y a Nancy Nápoles, Presidenta del Consejo Político Estatal, ex
diputada local de Tenancingo, todos ellos de la mayor agrupación interna, el
Grupo de Acción Política, que dirige el Senador Higinio Martínez Miranda, a
quien se le reconoce el liderazgo indiscutible del Grupo, entre quienes destaca
el Dip. Maurilio Hernández, actual coordinador de MORENA en el Congreso del
Estado. En los demás cargos de dirigentes se integraron las competidoras
corrientes internas. Esto debe conducir a la unidad interna, fundamental para
enfrentar la competencia electoral frente al grupo gobernante que se quiere
alzar con el triunfo para el 2023 y llegar al récord de un siglo de mandar en
el Estado de México.
Los opositores deben haber observado con
detenimiento el proceso inédito envuelto en una cantidad de chismes, rumores,
dimes y diretes, con el propósito de dividir, confrontar y desprestigiar a las
fuerzas y líderes al interior del partido. Lo relevante en Política son los
resultados. Aprecio a este Partido fortalecido, unido y listo para impulsar a
los Comités de Defensa de la 4T, con la Coordinación de nuestra querida
Paisana, la Profesora Delfina Gómez.
Lograron demostrar que la política se puede
y se debe hacer de manera diferente, mejor a como se practica hasta ahora. Es
con los ciudadanos libres, con su participación informada, organizada y activa,
no anulándola como lamentablemente algunos han acostumbrado. La transición
democrática debe ser impulsada con los militantes, en los partidos políticos y
luego a partir de estos.
Los partidos políticos son necesarios para
el buen funcionamiento de la democracia representativa, para todos los
ciudadanos y sus familias, pero más para los que menos tienen, deben servir a
los más necesitados. Si no existieran o funcionan mal, como es evidente
pretenden seguir algunos, los beneficiados seguirán siendo los más poderosos
económica y políticamente. Los partidos deben alentar la participación de las organizaciones
sociales como los sindicatos, los medios de comunicación, las organizaciones de
barrios y colonias, grupos del campo, las familias y los ciudadanos,
principalmente los más jóvenes. Como confirmamos: Sí se puede.
Mauricio Valdés
No hay comentarios :
Publicar un comentario