De acuerdo con el anteproyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación de 2019, entregado a la bancada de Morena el pasado jueves, el nuevo gobierno propone destinar 134 mil 900 millones de pesos al Ramo 23, que es una cantidad 13 por ciento menor respecto de los recursos aprobados en 2018.
Se trata de 21 mil 500 millones de pesos menos para ese Ramo cuyos recursos aprobados fueron de 156 mil 463 millones de pesos en el actual ejercicio.
El gasto en el Ramo 23 se duplicó en el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto, pues mientras al inicio de su administración ese Ramo contó con 77 mil 112 millones de pesos para 2018 la bolsa de recursos ascendió a 156 mil 463 millones de pesos, lo que implicó un aumento de 102 por ciento.
El Ramo 23 ha sido criticado por organizaciones por su opacidad al ejercer recursos por arriba de lo aprobado. De acuerdo con el calendario del gasto de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), se aprobaron 89 mil millones de pesos para este Ramo en el primer semestre de 2018, sin embargo, se ejercieron 96 mil millones de pesos, esto es un sobreejercicio de 7 mil millones de pesos.
La agencia calificadora Moody’s dijo en un reporte que los cambios en el Ramo 23 podrían dar lugar a reglas más claras sobre cómo se distribuyen estas transferencias, generando mayor transparencia y claridad en la forma en la que estos fondos son utilizados y asignados.
No obstante, la agencia agregó que la reducción o pérdida de transferencias tendría implicaciones para algunos estados y podría generarles mayores déficits financieros.
Moody’s indicó que una reducción o eliminación de este ingreso aumentará los requerimientos financieros de los estados, ya que alrededor de 49 por ciento de las transferencias del Ramo 23 han sido utilizadas para subsidios y gastos operativos.
POCO ESPACIO FISCAL
Héctor Villarreal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), explicó que en el documento de anteproyecto se plantean reasignaciones presupuestales importantes y consideró que el equipo de López Obrador comenzó con la presentación del anteproyecto del gasto para dar cabida a la propuesta de reacomodar los recursos y su destino.
“Lo del Ramo 23 de alguna manera no nos sorprende, hay apartados de este Ramo como los subsidios eléctricos que no los pueden tocar tan fácil, yo creo que en toda la parte más discrecional de apoyos financieros para entidades federativas y fortalecimientos financieros a estados es de donde sacaron dinero para los programas que quieren”, dijo.
El experto señaló que aún con la reasignación en el Ramo 23, hay poco espacio fiscal en el Presupuesto 2019 y que será complicado incrementar recursos a inversión y sectores como salud y educación, “y esto es un recordatorio de que tenemos finanzas públicas precarias”.
Jonathan Heath apuntó que la reasignación del gasto público posiblemente es indicativo de que las nuevas autoridades en Hacienda están haciendo una estimación más realista de los ingresos y de que están comprometidos con un manejo responsable de las finanzas públicas.
“Han prometido que su propuesta va a tener un superávit primario y que la propuesta que van a presentar va a ser consistente con eso y tendrá un superávit primario y pensaría que también habría un déficit fiscal de 2.5 por ciento del PIB o menos”, expuso el especialista económico.
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