Va de nuez
Por Elios Edmundo Pérez Márquez
Faro del Viento, Ecatepec, Méx.- De alguna manera, muy distante y distinta, pero que parece la misma, José Luis Gutiérrez Cureño ha logrado convocar a sus huestes y congregarlas en este lugar emblemático, no sólo porque luce imponente y rompe con el paisaje de una de las muchas colonias populares de este municipio, en el que todo hace falta y todo está por hacerse, sino porque, además, años atrás, cuando fue presidente municipal por primera vez, él aprovechó el espacio y, apoyado por Carlos Ramírez Brassetti, le dieron pa’lante y se aventaron la puntada de construir el primer teatro de Ecatepec; teatro que, en su momento, el propio Cureño vino a inaugurar, tal y como ahora, viene aquí, a las doce de la noche, para iniciar su campaña como candidato del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, para ocupar la presidencia municipal por segunda ocasión.
Se habla de un nuevo Cureño, más maduro, más consciente y con mayor experiencia: remasterizado, dicen. Puede ser. Lo cierto es que en su partido, el PRD, nadie le puede disputar el liderazgo, bien ganado, en más de 20 años de remar contra la corriente, de escalar por la pendiente y bregar desde adentro y hacia afuera, para cubrir un vacío que, en esos veintitantos años, en el mejor de los casos, nadie más ha querido llenar y, en el peor, nadie ha podido.
Le entró. Con un partido prácticamente borrado del panorama municipal, con dirigentes municipales que nadie conoce y con dirigentes estatales, bastantes chatos, una vez más, se tuvo que abrir paso y derribar obstáculos para lograr la candidatura.
El PRD no quería, la Nueva Izquierda no quería, una parte de la ADN, otra parte de la IDN no quería, pero la militancia sí quería, los líderes históricos del PRD en Ecatepec, sí querían, y la gente sí quería.
Sus propios compañeros de partido, el PRD, partido NINI, que ni picha, ni cacha, ni deja batear, lo obstaculizó de mil maneras, tal y como lo hicieron en 2006, algunos notables de infausta memoria.
Lo acusaron, lo amenazaron, lo sentenciaron y le pusieron de contrincante a su ex pareja sentimental, quien se prestó a esos entuertos, lo obligaron a mostrar músculo y lo hicieron pasar por la encuesta, con dos o tres adversarios de mucho choro y muy poca monta.
Ahora está aquí. Con los que lo apoyaron desde el principio, y los que se fueron sumando sobre la marcha: rostros conocidos y caras nuevas, viejos y jóvenes; mujeres, maduras y jovencitas; los históricos y los nóveles, la experiencia y la novatez. Parece la segunda edición de una crónica anunciada muy esperada en la que todos ya saben el guión y el desenlace: Cureño Presidente, 2a. parte.
No hay comentarios :
Publicar un comentario