El incremento de taxis piratas ha provocado conflictos y
pérdidas económicas para los concesionados quienes exigen a la Secretaría de
Movilidad del Edomex regular el padrón de unidades al oriente de la entidad.
Jorge González, quien maneja un taxi desde hace más de 20
años, denunció que en los últimos meses han incrementado vehículos que prestan
el servicio de taxis irregulares.
El taxista explicó que fue en el año 2000 cuando inició sus
trámites para recibir placas de servicio público. Señaló que tramitó sus placas
por medio de la organización a la que pertenecía, quien le cobró alrededor de
30 mil pesos.
“Luego del regreso a la nueva normalidad, se mejoró el
servicio, pero también hubo un aumento de taxis tolerados, e inclusive en la
misma organización se adhirieron carros de color, esto afectó, si antes te
hacías 400 o 500 pesos diarios ahorita apenas nos hacemos 300 pesos”
“En el rubro del taxi antes teníamos algo seguro,
supuestamente por eso compramos las placas y pagamos por un lugar y una base
para poder llevar a nuestras casas el respectivo gasto, pero a los líderes no
les importa eso; les importa llenar sus bolsillos”, denunció.
Al nororiente y oriente del Estado de México existen varias
organizaciones que agrupan gran número de taxis tolerados como Servicios
Colectivos Melchor Múzquiz (SECOMM), Grupo Izcalli, 2 de Junio, Radio Taxis
Chalco, Ruta 36, Grupo 300, Guadalupe Victoria por mencionar algunos.
Pese a que la Secretaría de Movilidad realiza operativos
para sacar de circulación a taxis que no cuenten con las placas de servicio
público, los permisos correspondientes y la documentación necesaria, no ha sido
suficiente ya que el incremento de este gremio ha venido al alza.
“La Secretaría de Movilidad si hace operativos, pero no
contra los piratas, quien sabe por qué, pero creo que nos paran más a los
contamos con placas de servicio público, y a los que trabajan con placas
particulares andan como Juan por su casa”, explicó.
De acuerdo con las estadísticas relativas a los vehículos de
motor en México, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) tiene
registros administrativos de 32 millones 291 mil 454 automóviles en circulación
en todo el país. De éstos, en el Estado de México, circulan más 94 mil 486
autos de modalidad de servicio público.
Por su parte Juan “N”, quien debido a la pandemia perdió su
empleo, comentó que ante la falta de trabajo optó a meter su carro a trabajar
como taxi.
“Pues no quedaba de otra al ver que no había trabajo, pues
metí mi carro como taxi, pago la tarjeta semanal, el censo, una playera que te
vende la organización; placas no, de nada sirve comprarlas, así como trabaja
uno que tiene placas, lo hace el pirata y sin ninguna restricción”, explicó.
Ante ello, el señor Jorge dijo que al ver el aumento de
taxis tolerados, no acudió a renovar sus placas de servicio público, ya que
solo es un gasto más, sin tener algún beneficio.
“No tiene caso pagar
por algo que muchos no pagan, y sin pagar siguen trabajando sin ningún
problema”, recalcó.
Cabe resaltar que la proliferación de taxis tolerados
también ha provocado enfrentamientos entre el gremio por invasión de bases.
Dichas agrupaciones cobran una tarjeta semanal a los
agremiados de un costo que va de 200 a 500 pesos dependiendo de la base donde
trabajan. Cabe mencionar que las organizaciones cuentan con un padrón de 500 a
3 mil socios, lo que genera una derrama económica considerable para los
dirigentes.
Entre pagos, cuotas, y competencia desleal ha provocado
afectaciones a la economía de los socios y concesionarios, por lo que exigieron
a la Secretaría de Movilidad tomar cartas en el asunto.
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