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jueves, 20 de enero de 2022

Rigoberto Vargas y Eliud Terrazas dirigentes seccionales del SNTE con el apoyo de la presidenta del IEEM, Laura Daniella Durán violentan la ley electoral buscan adjudicarse en lo obscurito el control de Nueva Alianza.

 

Rigoberto Vargas Cervantes, dirigente de la Sección 36 del SNTE, Eliud Terrazas Ceballos Dirigente de la Sección 17 del SNTE y  Laura Daniella Durán Ceja presidenta del IEEM 


 Tras que los 2 dirigentes sindicales del SNTE en el Estado de México iniciaron una  lucha corporativista sindical por tratar de hacerse a la mala  del partido Nueva Alianza, se inició una férrea y grotesca persecución del Profesor Mario Cervantes Palomino en su contra por parte de los secretarios generales de las Secciones 36 y 17, Rigoberto Vargas Cervantes  y Eliud Terrazas, al ver truncadas sus ambiciones de apoderarse operativa y económicamente este instituto político en el Estado de México.

Ambos dirigentes sindicales, uno de ellos diputado local por un distrito 20 del municipio de Zumpango, vieron en Nueva Alianza  una importante opción para operar y negociar el ejercicio político electoral sindical y una forma de adjudicarse las prerrogativas económicas que reciben de parte del IEEM.

Pero resulta muy raro y extraño, que Laura Daniella Durán Ceja consejera presidente del IEEM se preste en a operar un complot burdo y sin sustento armado por los dirigentes sindicales para presuntamente desconocer la dirigencia de Nueva Alianza.

La maldad en este perverso movimiento contra la dirigencia partidista queda clara porque la presidenta del IEMM  Laura Daniella Durán Ceja pese a conocer la Ley Electoral no aplica el Articulo 41, Base I, segundo párrafo que de manera muy clara y directa señala que está estrictamente prohibido la intervención de organizaciones gremiales en la conformación de partidos políticos.

Ante todo esto, el referente claro del presunto movimiento que encabezan Rigoberto Vargas Cervantes y Eliud Terrazas dirigentes de las Secciones 36 y 17  contra Nueva Alianza es una muestra de la ambición desmedida de poder y dinero de estos personajes que además se mueven en el mundo de la ilegalidad porque también en sus dirigencias sindicales rebasaron los tiempos de vigencia que marcan los estatutos porque ambos ya debieron haber entregado el control de sus respectivas sesiones e inclusive convocado a elecciones democráticas.

Ante todo esto resulta lamentable que tanto el IEEM como otras instancias gubernamentales intentan romper la unidad y la fuerza político electoral que actualmente tiene el partido Nueva Alianza, como se demostró en el pasado proceso electoral donde Panal se convirtió en la tercera fuerza política en el Estado de México, pero más allá de eso ya habrá medido la presidenta del IEEM que una mala decisión suya puede desencadenar en un problema político, jurídico y hasta en un estallido social por parte de la Militancia de Nueva Alianza en el Estado de México, habrá que darle seguimiento y estar atentos.


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