The Food and Drug Administration (FDA) tomó recientemente la decisión de prohibir 19 marcas de jabones para el aseo de cuerpo y manos por la preocupación del impacto en la salud humana y en el medio ambiente.
200 científicos y médicos de EU hicieron este mes de junio un llamado a la comunidad internacional para restringir la fabricación y uso de productos que contengan las sustancias químicas -triclosán y triclocarbán- citando una extensa investigación que mostró el peligro del daño de ambas sustancias químicas en cuerpo y manos.
Un informe publicado por el Environmental Health Perspectives declaró que cualquier sustancia química que haya sido utilizada por décadas, debe usarse solamente cuando haya una clara evidencia de que otorga un beneficio a la salud.
“Es urgente y necesario una mayor transparencia en la formulación de
productos antes de que una “sustancia antimicrobiana o antibacterial” sea incorporada al producto. El efecto a largo plazo en la salud de la población y de la ecología deberán ser cuidadosamente evaluadas”. Por ello proponen nuevas restricciones en el uso de sustancias químicas antibacteriales en todos los productos de aseo, belleza y cuidado personal, principalmente por su efecto a largo plazo.
American Cleaning Institute y Personal Care Products Council de EU reiteraron que “la evidencia científica probada refuerza el hecho de que los productos de higiene personal deben ser beneficiosos y efectivos y afirman categóricamente que los productos calificados como “antibacteriales” contribuyen a la resistencia del cuerpo contra bacterias, al incremento de infecciones y la adquisición de enfermedades”.
Es peligroso que las dos sustancias persistan ya que son tóxicas para la vida acuática y la de otros organismos en el medio ambiente. Existe también la preocupación de que contribuyen a la resistencia a antibióticos y a los antimicrobiales y han creado el terrífico “superbug” que normalmente es usado para controlarlos y erradicarlos.
Los 200 científicos explicaron que el -triclosán y el triclocarbán- son
disruptores endócrinos que pueden afectar los ciclos y el desarrollo hormonal. Tales sustancias químicas también están relacionadas en el incremento de la susceptibilidad a las alergias”.
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