Según revelaciones de la charla, el mandatario, Enrique Peña Nieto, se dijo dispuesto a asumir los costos y los riesgos personales, de gobierno y para el partido al que pertenece.
Enrique Peña Nieto, presidente de México.
CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Enrique Peña Nieto sostuvo ayer dos reuniones en el salón Presidentes, de la residencia oficial de Los Pinos, con líderes de opinión y algunos secretarios de Estado, en las que vertió algunas opiniones sobre la liberación de los precios de lagasolina, la relación bilateral con Estados Unidos y la corrupción.
Según revelaciones de la charla, el mandatario se dijo dispuesto a asumir los costos y los riesgos personales, de gobierno y para el partido al que pertenece. Explicó las razones por las que tomó decisiones difíciles ante escenarios inciertos e imprevisibles, al hablar de la medida respecto de los combustibles.
Indicó que México protegerá el precio de la gasolina de variaciones abruptas; que la decisión de aumentar el costo llega en un mal momento porque hay un desgaste del gobierno y del partido al que pertenece (PRI), y que incluso los militantes fueron los primeros en reprocharle la decisión.
Sin embargo, aclaró que no fue una medida tomada por cálculo político, sino por la necesidad de la calidad de vida de este país.
Publicaron después en sus cuentas de redes sociales algunos de los presentes, que al analizar el tema el mandatario nunca culpó algobierno anterior, y que todo está centrado en que esta nación no tenía ni tiene dinero para mantener el subsidio, cuando el escenario global es abrupto.
Se expresó preocupado por la incertidumbre que se vive ante elprecio de los hidrocarburos y por el número de elementos y factores externos que intervienen en su costo, la mayoría fuera del control del gobierno federal, pero dijo que se tratará de suavizar el ajuste del precio, lo que pasa por combinar a diario el precio del petróleo y loscombustibles a nivel mundial, con el tipo de cambio.
José Antonio Meade, secretario de Hacienda, presente en el encuentro, confirmó que el precio de la gasolina oscilará, a partir de hoy martes, entre 0 y 3 centavos al alza o la baja.
El jefe del Ejecutivo también habló de la relación bilateral y se dijo confiado en que los acuerdos con el gobierno de Estados Unidos, encabezado por Donald Trump, concluirán antes de diciembre y que los términos se comenzarán a definir hasta junio. Contó también que en el gobierno estadounidense “hasta el nombre de NAFTA quieren cambiar”.
Peña Nieto soltó a los asistentes que durante las conversaciones con su homólogo estadounidense se dejó establecido que México no pagará por el muro que pretende el republicano, porque eso es un asunto de dignidad nacional.
Admitió que viene un escenario complicado, un escenario difícil, que no hay que ser catastrófico pero que vienen ajustes bruscos.
Y respecto al tema de la corrupción, el jefe del Ejecutivo también fue tajante al informar que se están haciendo todos los esfuerzos “para localizar y detener al exgobernador de Veracruz, Javier Duarte”.
En consecuencia, lamentó que la corrupción sea un elemento dominante en contra de su gobierno, cuando se han hecho los esfuerzos institucionales para dotar al Estado de instrumentos que la prevengan.
El mandatario estuvo acompañado de los secretarios de Hacienda, José Antonio Meade; de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, el director de Petróleos Mexicanos (Pemex) José Antonio González Anaya; el vocero de la Presidencia, Eduardo Sánchez y el subsecretario de Hacienda, Miguel Messmacher.
Asistieron al encuentro, en dos diferentes momentos, una treintena de periodistas, columnistas y líderes de opinión.
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