El reto está en concientizar a los directivos de recursos humanos, directores generales y a todo funcionario de una empresa sobre el valor de la diversidad de pensamiento e inclusión
En México existen cerca de un millón de personas con alguna discapacidad en edad para laborar, de éstas sólo 300 mil se encuentra en alguna actividad de carácter remunerante; sin embargo, muchos con salarios por debajo del mínimo e, inclusive, sin pago. Esto ya que aún hay empresas que parten de la premisa errónea de que las personas con capacidades diferentes (PCD) son menos productivas.
Jorge Rosas, responsable de Recursos Humanos a nivel global deCinepólis, declaró en entrevista que buscan romper este paradigma puesto que la productividad, al contrario de lo que se menciona, mejora debido al esfuerzo, empeño y ganas con las que las PCD colaboran, “buscando”, dijo, “ser reconocidos por sus capacidades, no por sus discapacidades.”
Por ello, afirmó, desde hace dos años y medio se ha puesto en marcha el proyecto Éntrale, fundado y acuñado por las empresas pertenecientes al Consejo Mexicano de Negocios que ofrece vacantes con una remuneración justa para personas con alguna discapacidad, tanto física, sensorial y psicológica, y cuya meta es lograr que el 2% de la nómina total de una empresa sean PCD.
Aunque en términos fiscales los gobiernos estatales cada vez se suman otorgando estímulos a las empresas incluyentes, aún está presente la necesidad de que el gobierno predique con el ejemplo: primero, contratando PCD en la administración pública, y segundo, buscando mejorar las políticas públicas que otorguen incentivos para la inclusión laboral.
Del Teletón, asociación que trabaja de la mano con las empresas incluyentes a través de su programa de Inclusión Laboral, Jorge Rosas destacó su labor para el desarrollo de los niños y jóvenes con alguna discapacidad que, a la postre, aplican para los empleos de la plataforma, misma que cuenta con el apoyo de las ONG yAsociaciones Civiles, y que invita a empresas de todo tipo y tamaño a unirse.
También, en el tema de la erradicación de la discriminación laboral, resaltó el trabajo que ha realizado el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, no obstante, consideró que aún no existen las sanciones adecuadas para aquellos directivos que discriminen a las PCD. “El gobierno debe ser más tenaz para formar una cultura incluyente”, agregó.
El programa busca ofrecer beneficios para todos: para las empresasofrece una cooperación en la que determina, en base a estudios, el tipo de perfil destinado a la vacante que ofrecen; a los aspirantes una lista de empleos que se adapte a su discapacidad; y para las empresas que aún no son parte de este círculo de inclusión la oportunidad de informarse sobre los beneficios de esta tendencia laboral.
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