Mientras los gobiernos de los estados no soliciten a la SEP que se les descuenten los días que no se han presentado en sus respectivas escuelas, los maestros de la CETEG y de la sección 22 en Oaxaca cobrarán sueldos íntegros, pese a su ausencia en las aulas.
La SEP tiene el control de la nómina, la decisión de descontar el sueldo a los disidentes que se han manifestado del 7 al 9 de enero tiene que ser tomada por los gobiernos de Guerrero y Oaxaca
Debido a que el Acuerdo para la Modernización de la Educación Básica, firmado en 1992, establece que los gobiernos de las entidades son los patrones del magisterio, ya que se descentralizó la educación, son ellos quienes deben pedir a la secretaría federal que se les descuente a los maestros que se ausentan, pero mientras el gobierno de Guerrero o el de Oaxaca no hagan esa petición oficial, a través de un oficio formal, la SEP tendrá que seguir pagándoles como si dieran clases.
El problema, según señala la misma dependencia federal, es que la federación tiene el control operativo de la nómina, pero la autoridad educativa del estado mantiene la decisión de los pagos y por tanto, los gobiernos de Guerrero y Oaxaca tendrían que enviar una lista de los profesores que no se han presentado a sus funciones, a fin de que la SEP pueda descontarles los tres días de enero que han estado fuera de las aulas.
Desde el pasado 7 de enero, día en que más de 26 millones de alumnos del país regresaron a clases, como lo establece el calendario escolar 2014-2015, maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) han causado desmanes en la entidad, pero ello no impedirá que se les pague el sueldo íntegro de la primera quincena de este año.
El artículo 76 de la Ley del Servicio Profesional Docente estableció separar del cargo a los maestros que se ausenten “sin causa justificada” por más de tres días consecutivos o discontinuos en un periodo de 30 días naturales. Sin embargo, ni Guerrero ni Oaxaca han aplicado dicha sanción federal
Si bien la SEP tiene el control de la nómina, la decisión de descontar el sueldo a los disidentes que se han manifestado del 7 al 9 de enero tiene que ser tomada por los gobiernos de Guerrero y Oaxaca, quienes deben hacer la solicitud oficial, a la cual no están obligados legalmente.
A partir del primero de enero de 2015, la SEP asumió el control del nuevo Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa (FONE), tal como se estableció en el artículo tercero de la Ley de Coordinación Fiscal, modificada en 2013.
De ese modo, el Presupuesto Federal de Egresos 2015 estipuló 330 mil 325 millones de pesos para el pago de salarios de casi dos millones de plazas docentes que ostentan 950 mil profesores.
Para ello, diseñó el Sistema de Dispersión de Pagos Electrónicos, a fin de que ese dinero llegue directamente a las cuentas bancarias de los profesores sin pasar por las manos del gobierno federal.
Pero ese mecanismo no implica que la SEP pueda hacer los descuentos por su propia determinación, sino que esa decisión la toman los estados y por tanto, los profesores de la CETEG y de la sección 22 de la CNTE que han faltado a clases a partir del 7 de enero cobrarán íntegra su quincena, a menos que los gobiernos de ambas entidades determinen aplicar los descuentos.
RETENCIÓN DE SUELDOS FRACASÓ EN 2013
En mayo de 2013, la Secretaría de Educación de Guerrero retuvo el pago de sueldos a maestros de la CETEG que llevaban dos meses en paro de actividades; sin embargo, dicha medida no resolvió el conflicto y el gobierno del estado se vio forzado a pagar completos los sueldos.
SIN PROBLEMAS
Los profesores de Oaxaca y Guerrero han logrado sortear las sanciones previstas en la Reforma Educativa.
El artículo 76 de la Ley del Servicio Profesional Docente estableció separar del cargo a los maestros que se ausenten “sin causa justificada” por más de tres días consecutivos o discontinuos en un periodo de 30 días naturales. Sin embargo, ni Guerrero ni Oaxaca han aplicado dicha sanción federal.
La reforma dio como plazo hasta el 1 de enero último para que el gobierno federal asumiera el pago de salarios a maestros, administrados de manera descentralizada por las entidades federativas desde 1992.
Este sistema favoreció por décadas arreglos entre secciones sindicales y algunos gobiernos estatales, volviendo opaco el pago a docentes y permitiendo irregularidades como aviadores y fantasmas.
APATZINGÁN Y ACAPULCO REPONDRÁN LAS CLASES
Las escuelas de Acapulco y Apatzingán que se vieron obligadas a no abrir sus puertas por la inseguridad y la extorsión del crimen organizado tendrán que reponer los días perdidos, pues aunque son ausencias justificadas, tienen la obligación de cumplir los 200 días que establece el calendario escolar.
Aunque la situación en ambos municipios fue reportada a las autoridades educativas estatales y que éstas avalaron mantener cerrados los planteles, para no exponer a estudiantes y maestros, eso no quiere decir que pueden dejar pasar los días perdidos, ya que la Ley General de Educación establece que los niños tienen que cursar 200 días de clases efectivos.
Ante ello, las autoridades educativas locales tienen que buscar alternativas para que se cumpla con esa disposición oficial, pese a que estén amenazadas por la delincuencia organizada.
Desde el pasado 7 de enero, 109 escuelas de Acapulco no regresaron a clases como el resto del país, ya que los profesores denunciaron que el segundo pago del aguinaldo los convierte en presas de la extorsión por parte del crimen organizado.
Ante ese riesgo, los maestros de 10 por ciento de los planteles de educación básica de ese municipio guerrerense pidieron mantener suspendidas las clases hasta que pase el peligro, pero una vez que regresen a la normalidad, la SEP establece que están obligados a reponer las jornadas perdidas.
Tanto la autoridad educativa del estado como los maestros de esos municipios ya tienen en la lista tres días perdidos.
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